Meditabundo: Cambiamos o ahogados

LA VOZ DE LOS QUE NO LA TIENEN ||

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El papa Francisco nos dice: “Los corruptos son el anticristo. Cuanto mal hacen los corruptos en la comunidad cristiana, que el señor nos libere de caer en ese camino de la corrupción. Los corruptos son grandes desmemoriados, han olvidado el amor con el que Dios ha creado su viña. Y se han convertido en adoradores de sí mismo. Imploro la gracia de no convertirnos en corruptos”.
 
En el sistema político dominicano está entronizada la corrupción de los “anticristos”. Veamos solo dos casos: La sentencia de la Suprema Corte de Justicia en el caso Sund Land. Se violó la Constitución y el presidente de la Suprema dijo que fue presionado. Se arrodilló frente a “poder frena poder”. No se actuó contra los que cometieron el delito donde están involucrados 130 millones de dólares. El segundo caso es cuando el presidente de la República licenciado Danilo Medina declara inaceptable en contrato con la Barrick Gold. Sabemos son interminables los casos de corrupción contra el erario, como lo indican los informes de la Cámara de Cuentas.
 
El gobierno del presidente licenciado Danilo Medina da vida al Código de Ética para prevenir la violación a la Constitución y leyes. Pero, senadores y diputados continúan disfrutando su barrilito, franca violación al artículo 146 proscripción de la corrupción de la Constitución.
 
Los dominicanos somos abusados, la Ley de reforma fiscal nos quita nuestra ley suprema: el bienestar.
 
Como bien sabemos “el capitalismo salvaje” es el azote en este falso sistema llamado democracia.
 
Urge la fuerza de la responsabilidad, no muestra vigor, vida, el cumplimiento de la firma del compromiso de la persecución de la corrupción. Veamos: circunstancias, hechos: la acusación de la Cámara de Cuentas en el caso Wessin Chávez y el resultado del caso de la Liga Municipal por las irregularidades de RD$117 millones. La justicia no estuvo acorde con la Cámara de Cuentas.
 
Mis hijos Néstor arquitecto y José ingeniero me dijeron: papá no hemos tenido suerte en la rifa de las obras del gobierno. Pero, hemos ganado estamos contentos por la transparencia de los sorteos. Se acabó el vergonzoso grado a grado. Ese es un paso moral, está naciendo la honestidad administrativa. Nos felicitamos…
 
Solté el bolígrafo, profundo en meditabundo las neuronas me dictan: la opulencia, el tener, borra en la mente que Dios es lo primero y no el dinero. Esta es la gran debilidad de los enraizados en la avaricia acosta del sufrimiento de los demás. Si estamos de acuerdo con el resplandor de la justa razón, seríamos todos beneficiados, felices. Sin embargo vivimos en una sociedad degradada, al hombre lo tratan por lo que tiene, no importa como lo adquiere y no por lo que es. El dominicano debe desprenderse de sí mismo y volver al otro. Acordarse del otro es olvidarse de sí mismo. Alejarse de la ley del apego, es retener, sistema que esclaviza. Ser el más rico en la pobreza, ser el más libre por ser el más pobre. Decirse: no me falta nada por no tener nada. Darse al amor como la lluvia que cae en grama quemada. Vivir la libertad de las gaviotas y el brincar juguetón de los delfines. Comprender que para el hombre poseer la perfecta libertad tiene que soltarse a sí mismo y dar el salto hacia el amor.
 
Nuestro invitado de hoy: Aristóteles: El hombre perfeccionado por la sociedad es el mejor de los animales, pero el más terrible vive sin ley ni justicia.
 
Estamos de acuerdo con Aristóteles al ver como príncipes inmunes a los anticristos dominicanos que se enriquecen por actuar como chivo sin ley.
 
El autor es vicealmirante retirado de la Armada Dominicana.