A casi cuatro años de la “matanza de Paya”, este sigue siendo uno de los casos más controversiales de los últimos años, cuya complejidad lo caracteriza como uno de los talones de Aquiles de la justicia dominicana.
El hecho en el que fueron asesinados a balazos seis colombianos tuvo lugar en un cañaveral de la comunidad Ojo de Agua, de Paya, provincia Peravia, el 4 de agosto del año 2008 y en él participaron civiles y militares.
La ejecución involucró 1,200 kilos de cocaína y una cantidad de dólares que rondará los US$15 millones, de los cuales las autoridades aún no han podido establecer su paradero.
Los asesinados fueron: Oscar Darío Naranjo, Darío José Asencio, Eduardo de León Perozo, Jesús del Río Hans, Antonio Zuluaga Mustiola o Cerino Enrique Marín Gutiérrez, Apolinar Altamirano Cuéllar y Geovanny Bowie Duffis. Entre los acusados figuran 22 personas, 16 de las cuales resultaron condenados y 6 librados de toda culpabilidad.
El 3 de diciembre de 2010, el Tercer Tribunal Colegiado del Distrito Nacional condenó a 30 años de prisión Edward Mayobanex Rodríguez Montero, José Luís Montás Vargas (Duro Motor, fallecido), Luís de Jesús Lara Martínez, Ricardo Guzmán Pérez, Miguel Peña Figuereo, Jorge Luís Chalas y Antonio Manuel Roche Pineda.
Asimismo, fueron sentenciados a 20 años de reclusión mayor: Dennys Jairo Rodríguez Pérez, Yaneuris Manuel Calvo Tejeda, Andrés Tapia Balbuena y el nicaragüense Orín Clinton Gómez, éste último único sobreviviente del grupo asaltado.
También recibieron la pena de 10 años de privación de libertad: Jesús Sánchez Piña y Scarlet Aristy Rosa; mientras que con 5 y 3 años fueron castigados Augusto Alberto Dannery Andujar, Marcos Fajardo y Andrés Berroa Mercedes, respectivamente.
El tribunal descargó a: Redy Manuel Encarnación, Girson Antonio González, Domingo Onésimo Marmolejos, Joaquín Pérez Féliz, Noe Martín Sterling Villalón y José Vinicio Simé Cisnero, por entender que el Ministerio Público no aportó elementos de pruebas que sustentaran la acusación en su contra.
Los jueces actuantes en el veredicto ordenaron el decomiso de parte de los bienes incautados a los condenados y la devolución a los absueltos.
Una novedad que llamó mucho la atención de la población fue lo ocurrido en febrero de 2011, cuando José Luis Montás Vargas (El Duro Motors), condenado a 30 años de prisión, murió aquejado de hepatitis A, cuando se encontraba recluído en la cárcel de La Victoria. Los parientes alegaron que hubo negligencia por parte de las autoridades, que condujeron muy tarde su familiar al médico.
De los 16 condenados, 14 elevaron un recurso de apelación hace cuatro años. Desde entonces ha llovido mucho. Los apelantes son: Mayovanex Rodríguez Montero, Luis Lara Martínez, Scarlet Aristy y su esposo Ricardo Guzmán, Dennis Rodríguez Pérez, Yaneurys Manuel Calvo, Jorge L. Chalas, Andrés Tapia Balbuena, Miguel Peña Figueroa, Andrés Berroa Mercedes, Jesús Sánchez Pineda, Antonio Roché Pineda y Orin Clinton Gómez.
Hallazgo del fusil y versiones
Para cometer el macabro hecho de sangre, los actuantes habrían utilizado armas de fuego de alto calibre. En octubre del 2008, las autoridades presentaron a los medios de comunicación parte del fusil M16, con el que aseguraron fueron ejecutados los colombianos.
La Marina de Guerra señaló al exteniente de Navío, Edward Mayobanex Rodríguez Montero, como la persona que había utilizado el arma en la masacre. Fue lanzada al mar por Jorge Luis Chalas, con la finalidad de esconder evidencias, conforme a los interrogatorios.
El fusil fue encontrado específicamente en Punta Torrecilla, a 30 pies de profundidad y midió dos pies y un centímetro.
Sobre el suceso, los medios de prensa publicaron diversas versiones, las cuales señalaban que se trataba de un “tumbe” de 1,200 kilos de cocaína y una suma indeterminada de dólares, que nunca apareció.
La droga habría sido bombardeada desde una aeronave que sobrevolaba la zona Sur del país y fue llevada de una residencia de Paya por siete hombres vestidos de negro, a bordo de un camión, quienes raptaron en la vivienda a las personas que más tarde aparecieron acribilladas a balazos.
El vigilante de la residencia, identificado como Emilio Basilio Victoria (Américo), dijo a la Policía que varios individuos aribaron en yipetas y cargaron con dos bultos que había en otro vehículo estacionado en el lugar.
La Dirección Nacional de Control de Drogas informó que en esa entidad se tenía la presunción de que se trató de un ajuste de cuentas, en un caso de tráfico de drogas al que daban seguimiento desde hacía meses.
Aplazamientos
El 13 de junio de este año, los jueces de la Segunda Sala de la Corte de Apelación del Distrito Nacional aplazaron, por novena ocasión, para el 19 de septiembre, a las 9:00 de la mañana, el juicio de apelación presentado por 14 de los sentenciados en el caso Paya.
La decisión fue tomada a los fines de que el condenado Edward Mayobanex Rodríguez Montero, junto a su asignado defensor público Emilio Aquino, coordinara los alegatos de su defensa.
Los jueces del Tercer Tribunal Colegiado dictaron la sentencia a 30, 20, 15 ,7 y 5 años de cárcel a los imputados el día 3 de diciembre del 2010, mientras que el conocimiento del recurso de aplicación se inició el primero de junio del 2010.
Este caso, el más sonoro en la historia de la República Dominicana por la gran cantidad de militares envueltos en la matanza, refleja la fragilidad de la justicia dominicana y lo beneficioso que resulta el Código Procesal Penal (CPP), para quienes delinquen y quedan en libertad o incidentan el juicio hasta que desistan de las acusaciones.
Caso Paya: Talón de Aquiles Justicia en RD
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