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Exponen hidrocefálica para sacar provecho económico

LA VOZ DE LOS QUE NO LA TIENEN ||
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Imposible permanecer indiferentes ante la imagen de la pequeña con problemas de hidrocefalia, expuesta por supuestos parientes en diferentes calles de la capital dominicana, ante peatones y conductores, quienes conmovidos por su condición de salud le regalan algunas monedas.
 
Esta escena se ha observado en distintos puntos de la capital dominicana, donde sus acompañantes, una señora que dice ser su abuela y dos jóvenes, uno presentado como amigo y el otro nieto, solicitan colaboraciones económicas a los transeúntes para someter a la niña a una operación y cubrir los gastos en medicina y alimentos.
 
Según plantea la supuesta familia, su objetivo es juntar el dinero suficiente para comprar una válvula que requiere la infante, a fin de que pueda drenar el líquido que acumula en la cabeza, lo que es puesto en duda por personas que han colaborado con esa causa, ya que llevan tiempo suficiente de haber obtenido esos recursos y la historia se mantiene igual.
 
Algunos testimoniantes afirmaron a este multimedios DominicanosHoy, que resulta muy casual que esos presuntos parientes se mantengan solicitando ayudas, sin que haya una solución y consideran que solo se trata de un vil negocio.
 
Lo triste es…
 
La niña, nombrada Francis, tiene alrededor de dos años, es uno de los tristes ejemplos del diario vivir, pues su estado de salud no es, como debiera ser, una preocupación para quienes la aman, sino un “objeto”, para obtener dinero.
 
A menudo en las diferentes calles y avenidas de la capital se observan personas con algún tipo de discapacidad, quienes piden, pues su situación les impide conseguir empleo. No obstante, como es el caso de la menor con Hidrocefalia, otros se benefician indecorosamente de tan dramático problema.
 
Este equipo valoró y conoció opiniones que describen el caso como si se tratara de una obra de teatro: allí, en la avenida V Centenario se encuentra la señora apostada en un muro, con la pequeña en brazos, acompañada de los dos muchachos con cartelones, donde se lee la petición de ayuda que complete el dinero de “una operación” para Francis.
 
Perdida la mirada y la cabeza más grande de lo normal por la retención de líquido, propio en personas que padecen este tipo de enfermedad, así permanece durante horas a la intemperie la menor, ante cuya imagen estas reporteras apenas pudieron contener la emoción; menos aún cuando algunos dejaban a su lado monedas, o algún alimento.
 
La señora “denominada” abuela, narró que una hija suya de 17 años, la había traído al mundo, como consecuencia de una violación. En una primera entrevista, este medio de comunicación contactó con el doctor Félix Antonio Cruz Jiminián, con el objetivo de que ayudara a la enferma y aún teniendo la aprobación del galeno, pudimos comprobar que no había interés familiar al respecto.
 
Cruz Jiminián aseguró que ese tipo de personas, en ocasiones rentan a discapacitados para pedir en las calles.
 
Este multimedios consideró imprescindible exponer ante la opinión pública un hecho que da tristeza y miedo, al comprobar que existan personas sin escrúpulos que protagonizan tan atroz situación.
 
Todavía nos preguntamos: ¿quiénes son esas personas? ¿De dónde salen? ¿Cuáles serán realmente los padres de esta menor?, y ¿qué clase de gente negocia con niños con impedimentos físicos?
 
Preocupa el futuro y la salud de Francis, para quien puede haber un futuro mejor, si los “familiares” la conducen a la clínica Cruz Jiminián, donde desde hace tiempo se les está esperando…

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