Antonio Bastardo: «no tengo ninguna lesión»

LA VOZ DE LOS QUE NO LA TIENEN ||

Follow

«No tengo ninguna lesión», dijo Bastardo en una entrevista en Filadelfia el último día de los juegos de exhibición de su equipo.
 
El lanzador de 26 años admitió, sin embargo, que su primavera no ha sido placentera.
 
«Sí, he tenido unos cuantos problemas. Estuve deshidratado en el Spring Training. No se si estaba muy caliente allá abajo. Mira, son cosas que pasan. Hay veces que uno mismo se descuida ante el calor y eso».
 
La velocidad de las rectas de Bastardo no disminuyó mucho, par de millas por hora, de 92 MPH a 90 MPH, pero el descenso fue suficiente para que el técnico de lanzadores de los Filis, Rich Dubee, expresara su preocupación.
 
«No estoy viendo la velocidad que debo ver», dijo Dubee a los medios, la última semana que los Filis practicaron en Clearwater, Florida. «A la vez creo que corre una epidemia por el campamento. Tenemos muchos brazos muertos. Eso pasa mucho a veces», manifestó el técnico quien también tuvo que tratar el tema de la disminución en la velocidad de las presentaciones de Roy Halladay, el as del equipo.
 
Los Filis descansaron a Bastardo una semana completa a mediados de marzo a ver si el reposo lo ayudaba a recobrarse. El nativo de Hato Mayor sufrió su peor salida de la primavera en su segunda aparición después de la pausa: tres carreras, dos hits, y una base por bolas en dos tercios de entrada contra los Piratas.
 
El Gerente General de los Filis, Rubén Amaro, hijo, descartó que Bastardo estaba sufriendo de nuevo del Síndrome de salida torácica que lo afligió en el 2010. Dicho síndrome es un padecimiento raro que implica dolor en el cuello y en los hombros, entumecimiento y hormigueo en los dedos de las manos, y debilidad en el brazo. Falta de espacio para los vasos sanguíneos y nervios que vienen de la columna vertebral al brazo, cuando pasan o atraviesan la clavícula y las costillas superiores, es la causa de la condición.
 
En el 2011, Bastardo tomó medicamentos para aliviar el síndrome y disfrutó de su mejor campaña en las Mayores: 6-1, 2.64, ocho rescates en ocho oportunidades, y el mejor WHIP (bases por bolas y hits por inning lanzado, conocido en inglés como Walks plus Hits by Innings Pitched), 0.93, entre todos los relevistas del Viejo Circuito.