close

Ouro Preto une la tradición de la Semana Santa barroca al turismo

LA VOZ DE LOS QUE NO LA TIENEN ||
Facebook
Facebook
Youtube
Instagram

Ouro Preto (Brasil).- Ouro Preto, una ciudad brasileña de gran riqueza arquitectónica, pretende entrar en el circuito turístico del país con el reclamo del espíritu barroco de sus procesiones de Semana Santa, que discurren por calles decoradas con coloridas alfombras elaboradas por vecinos.

Este municipio, el primero del país que fue declarado Patrimonio Histórico y Cultural de la Humanidad por la Unesco, debe su denominación a las reservas de oro que inundaban su territorio en la época de la Colonia y que fueron extraídas por los portugueses en el siglo XVIII para su posterior venta.

"Nuestro desafío pasa por combinar el misterio religioso del siglo XVIII con el dinamismo del XXI. Debemos tener una mentalidad abierta y los vecinos tienen que saber que hay que cuidar el turismo, del que dependen 3.000 empleos de la ciudad", explicó a Efe el alcalde Angelo Oswaldo Santos.

Considerada como la primera urbe de Brasil, Ouro Preto (Oro Negro), que en julio próximo celebra los 300 años de su fundación, atrae anualmente a miles de turistas que contemplan su rica arquitectura, conformada sobre todo por las nueve iglesias de estilo barroco levantadas durante la época colonial.

Estos días, los vecinos del pueblo se movilizan para dar colorido a sus calles con alfombras confeccionadas con serrín y decoradas con flores, por donde luego discurren las procesiones y las típicas representaciones vivientes de Semana Santa.

Los tapetes, que sólo estarán concluidos para el Domingo de Pascua, representan la continuidad de una tradición centenaria que implica el esfuerzo colectivo de los ouropretanos, según explicaron a Efe representantes de colectivos vecinales.

Los turistas son incluso invitados a completar la confección de las alfombras, que son diseñadas en función de una temática escogida con anterioridad por el pueblo.

Entre los actos religiosos destaca la tradicional ceremonia del lavatorio de pies, en recuerdo al gesto de humildad de Cristo hacia sus apóstoles la noche antes de morir, que se celebra el Jueves Santo junto a la iglesia de San Francisco de Asís.

Desde este santuario parte al día siguiente la procesión solemne del Santo Sepulcro, en la que la imagen de Cristo es trasladada hasta la iglesia del Pilar, en la que predominan piezas de oro en su interior y cuya fachada estará ornamentada para la ocasión con colores rojo y morado en señal de luto.

Al paso de la procesión, los vecinos, ataviados con indumentarias religiosas, representan varios pasajes bíblicos en presencia de una multitud que presencia este espectáculo en medio de un silencio sepulcral y respetuoso.

"Por estas fechas, aquí se redobla la fe religiosa. La gente llega como turista y se marcha como peregrino", dijo a Efe el alcalde.

Con esta programación orientada a los creyentes y considerada como una ocasión para meditar y profundizar en el misterio de la fe, Ouro Preto, con una población que oscila en torno a los 70.000 habitantes, pretende diversificar su sector turístico, principal fuente económica de la localidad.

En las celebraciones de este año los párrocos de la ciudad imprimirán a los actos religiosos un marcado acento medioambiental con el objetivo de convertir a la Iglesia en el epicentro de una profunda reflexión ecológica encaminada al consumo responsable de agua.

"La defensa del Medio Ambiente debe ser una de las grandes preocupaciones del ser humano y la Iglesia debe trabajar en ese sentido", manifestó Marcelo Moreira, párroco de la iglesia del Pilar. EFE

No Comments

Leave a reply

Post your comment
Enter your name
Your e-mail address

Story Page