El Centro Montalvo reitera su frustración ante la invariable apatía del gobierno en el incumplimiento de la Ley de Educación, violándola otro año más, ya que desde su sanción nunca se ha cumplido la inversión de como mínimo el 4% del PIB o el 16% del gasto público. Para el 2011 se propone el 2.37%.
Asimismo, en lo que respecta a la inversión en vivienda, el Montalvo señala que para el año 2008 a pesar de que fue identificado que casi el 70% de las viviendas contaban con alguna vulnerabilidad, la inversión en este sentido no ha superado el 0.6% del PIB, siendo que en el corriente año está previsto una suma que alcanza al 0.4% y para el 2011 se propone disminuirla a 0.08%.
Debe recordarse que estas vulnerabilidades son las que se evidencian cuando se presentan tormentas tropicales como las que estamos viviendo.
El presupuesto no es más que la expresión monetaria de las acciones que pretende llevar adelante un gobierno. En una visión a largo plazo el país se encuentra discutiendo una Estrategia Nacional de Desarrollo. Esta visión es la que debería dar guía a los importes expresados en el presupuesto anual, así como también éste debería seguir los lineamientos de un Plan Plurianual, expresó la institución.
La propuesta de Estrategia Nacional de Desarrollo, desde la sociedad civil, hace hincapié en las áreas sociales, entendiendo que sin una distribución más justa de las políticas de ingresos y gastos del Estado no hay vida digna posible. Pero en respuesta a estos reclamos el Plan Plurianual presentado a fines del mes de septiembre desmedra la inversión social que tan sólo llegaría en 2013 a los niveles previstos para el año en curso, siendo que para el período 2011-2012 se proyectan bajas significativas.
El costo de todas estas políticas se carga a los que menos tienen, ya que la estructura de ingresos del Estado recae fuertemente sobre los impuestos al consumo y no sobre aquellos que gravan rentas, ingresos o riqueza; siendo que tampoco reciben una educación digna, un servicio de salud y seguridad social ya que no se prevé la entrada en vigencia del régimen contributivo-subsidiado, las tormentas siguen acechando a viviendas destruidas –si hay viviendas- y el sistema de agua y alcantarillado no resulta eficiente para evitar inundaciones.
El cólera acecha a nuestros vecinos y la prevención de esta enfermedad pasa por educar a la gente, garantizar cuestiones sanitarias y tener mecanismos de contención en el sistema de salud.
Por tanto, el Centro Montalvo reiteró que la respuesta a estos y tantos otros problemas nacionales se resuelven con partidas presupuestarias que les destinen fondos. El proyecto de presupuesto 2011 estima un total de gastos de $390,476 millones, lo que representa el 18.6% del PIB, de los cuales $276,863 millones se destinan a gastos e inversiones, mientras que los $113,613 millones restantes deberán destinarse al servicio de la deuda.
Los ingresos totales ascienden $293,216.8 millones, por lo que la diferencia se financiará con deuda por un total de $97,259 millones. De esto surge que los gastos originados por la deuda son mayores que los ingresos por deuda.
Lo que sí queda claro es que para el gobierno es una prioridad la estabilidad macroeconómica y el “crecimiento con estabilidad” lo que logrará “impulsando, principalmente, la ejecución de proyectos de infraestructura en sectores como los de energía eléctrica, obras viales y transportes, incentivando a su vez, la agropecuaria, la industria y el turismo, así como los enfocados hacia la inversión en proyectos de rentabilidad social, en las áreas de la salud, educación y medio ambiente”. Sin embargo, en términos funcionales, el único gasto que crece es el correspondiente al servicio de la deuda.
Por todo lo expuesto es que podemos afirmar que el Proyecto de Presupuesto tal y como fue presentado por el Poder Ejecutivo no contempla la Inversión Social como un eje prioritario de gobierno; y si algo cambia es para que todo siga igual; o bien, para peor.
