Saná.- Al menos quince personas han muerto en un bombardeo aéreo y terrestre del Ejército yemení contra un grupo de rebeldes chiíes en la provincia de Saada, al noreste de la capital, informaron hoy a Efe fuentes de los insurgentes.
En esta ofensiva, la mayor contra los rebeldes en esta zona montañosa, según el Ejército, los militares han utilizado aviones de combate y helicópteros para atacar las posiciones fortificadas de los militantes chiíes.
Asimismo, la artillería del Ejército continúa desde ayer por la noche bombardeando los refugios de los insurgentes, situados en una zona fronteriza con Arabia Saudí, añadieron las fuentes.
El grupo chií, conocido como "hutíes", denominación que provine del nombre de su fundador, el ya fallecido Husein al Huti, han protagonizado varias revueltas contra el gobierno central desde el año 2004.
A pesar de los esfuerzos del emirato de Qatar, que medió para poner fin a la crisis, esta ofensiva militar es el quinto gran enfrentamiento entre los rebeldes y las tropas gubernamentales.
En este sentido, la agencia de noticias oficial yemení, SABA, dijo que la ofensiva contra los insurgentes se produjo después de que "los esfuerzos de paz llegaran a un punto muerto".
El pasado 30 de julio, el Gobierno yemení anunció que 346 personas habían muerto un año después de que el presidente declarara el fin oficial de las hostilidades entre el Ejército y los insurgentes chiíes.
El enfrentamiento entre esa milicia chií y las tropas gubernamentales se remonta al año 2004, cuando centenares de personas, incluido Al Huti, perdieron la vida en violentos combates en Saada.
Desde entonces, el hijo del fundador del grupo chií, el clérigo Abdelmalik al Huti, encabeza la rebelión en esta provincia situada al noreste de Saná.
Los chiíes representan aproximadamente el 30 por ciento de los cerca de 25 millones de habitantes de Yemen y están concentrados principalmente en el norte del país, especialmente en las regiones de Heya, Zemar y Saada. EFE
