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VIOLENCIA, en mayúsculas…

LA VOZ DE LOS QUE NO LA TIENEN ||
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Salir a la calle significa todo un desafío. En cualquier avenida puede alguien disparar su arma y cobrar una víctima inocente, (una más). La violencia es reina y señora de la sociedad dominicana.

Los titulares no pueden ser más inquietantes e inverosímiles: “Santo Domingo. Un hombre fue muerto a balazos por desconocidos (…) Este es el sexto caso similar que ocurre durante las últimas 72 horas en el área del Distrito Nacional y la provincia de Santo Domingo”.

En otro orden, se informa que “… el señor Víctor Jiménez fue asaltado y despojado de RD$5.523, cuando salía junto a una amiga de una estación de combustibles…”

O esta otra: “(…) cuatro desconocidos despojaron de dinero en efectivo, tarjetas de crédito y otras pertenencias al ingeniero Francisco Contreras, cuando éste se disponía a salir de una sucursal bancaria situada en la avenida Winston Churchill”.

Y así sigue una larga lista de informaciones que hablan de asaltos, robos, balazos y, en definitiva, de múltiples manifestaciones de violencia en la República Dominicana.

Se desmantelan bandas y surgen otras nuevas y peores. La delincuencia aterroriza, literalmente hablando, los barrios: da igual la categoría de “residenciales”, o no.

En esta misma fecha del año 2007, aproximadamente, el Jefe de la Policía aseguró que esa institución no descansaba en su afán de reducir a la mínima expresión la comisión de acciones delincuenciales que tenían lugar y que para ello sería destinado el número de agentes policiales que fuera necesario.

Un año después las cosas andan como otrora. Ni remotamente puede hablarse de los “barrios seguros”. La gente pierde cada vez más la fe, en momentos en los cuales esta es imprescindible.

Urge tomar medidas más drásticas y exterminar de raíz este mal que parece multiplicarse por día, dejando tras sí huellas de homicidios, tristeza y escepticismo. Para nadie es un secreto que hasta ahora las acciones han sido inválidas y frente a nuestras narices la parca se viste triunfal y agresiva con ropajes de violencia, llevándose sin escrúpulos muchas vidas inocentes.

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