Bruselas. La Autoridad Europea para la Seguridad Alimentaria (AESA) han detectado dioxinas por encima de los niveles permitidos por la Unión Europea (UE) en el 8% de alimentos y piensos analizados, en un estudio realizado en 21 países comunitarios.
Sin embargo, los científicos comunitarios afirman que muchas de las muestras infectadas proceden de análisis especiales que se hicieron durante episodios de alarma por contaminación de dioxinas.
La AESA ha publicado hoy las conclusiones de una investigación sobre los índices de dioxinas y PCB, sustancias cancerígenas que se originan por procesos químicos y que se concentran sobre todo en las grasas de los animales bovinos, la leche, las aves y el pescado.
En el estudio, este organismo ha examinado 7.000 muestras en 21 países, correspondientes a los años comprendidos entre 1999 y 2008; España ha aportado un 2% de las pruebas.
El contenido en esas sustancias varía según el producto y es más frecuente en el hígado de animales (especialmente de los peces) y sus derivados; en los piensos los índices más altos se han detectado en los aceites de pescado, según la AESA.
La detección de dioxinas provocó varias crisis alimentarias en Europa y la más grave fue en 1999, cuando Bélgica paralizó su comercio avícola, tras descubrir que las aves de su país se habían alimentado con piensos contaminados por dioxinas; la alarma provocó la inmovilización de alimentos en toda la UE, incluyendo España.