Washington.- La economía de EE.UU. empezará a generar a partir de esta primavera más empleos de los que destruye, según un informe de la Casa Blanca, que prevé una ganancia mensual promedio de 95.000 nuevos trabajos a lo largo del año en curso.
La presidenta del Consejo de Asesores Económicos de la Casa Blanca, Christina Romer, dio a conocer hoy el Informe Económico del Presidente, de 458 páginas y en el que se exponen la política económica del Gobierno y las previsiones para el futuro.
El presidente de EE.UU., Barack Obama, firmará hoy el informe en una ceremonia a puerta cerrada y lo trasladará al Congreso. "Para 2010 prevemos un crecimiento medio del empleo de 95.000 puestos de trabajo por mes", declaró Romer.
Aunque los últimos datos del Departamento de Trabajo revelaron una nueva pérdida de puestos de trabajo en enero -20.000 empleos-, el Consejo de Asesores Económicos calcula que la destrucción terminará y se comenzará a generar empleo neto "de aquí a la primavera" boreal.
No obstante, la recuperación será lenta. Las cifras de la Casa Blanca apuntan a que no se alcanzarán los niveles de empleo previos a la crisis económica hasta 2018, cuando el paro se reducirá al 5,2 por ciento.
Para este año, el porcentaje medio de desempleados alcanzará el 10 por ciento, según los datos aportados por Romer y ya adelantados en el proyecto de presupuesto que Obama presentó la semana pasada ante el Congreso.
En enero, pese a la destrucción neta de empleo, el porcentaje de paro se redujo ligeramente y quedó en el 9,7 por ciento, frente al 10 por ciento del mes anterior.
Según las previsiones del Gobierno, ese porcentaje caerá gradualmente y en 2012 se habrá situado en el 8,2 por ciento. Para 2018 la cifra habrá caído al 5,2 por ciento, el nivel en el que se mantendrá hasta 2020, el último año que cubre el informe.
En 2006, en pleno periodo de expansión de la economía en EE.UU., antes de que reventara la burbuja inmobiliaria, el índice de desempleo era del 4,6 por ciento.
Cuando Obama llegó a la Casa Blanca, hace trece meses, la economía perdía 700.000 puestos de trabajo al mes y se encontraba sumida en su crisis más profunda desde la gran depresión, recordó Romer.
"Los retos económicos que encaró la nación cuando el presidente Obama inició su gestión estuvieron entre los mayores en nuestra historia", señaló.
El informe considera "un éxito" el plan de estímulo económico, promulgado por Obama hace un año, que asignó unos 787.000 millones de dólares en programas para el gobierno federal, los gobiernos estatales y locales, e iniciativas de promoción del empleo.
Según la Casa Blanca, ese programa ha ayudado a preservar o crear unos 2 millones de empleos.
Según las cifras ajustadas del Departamento de Trabajo, desde que se inició la recesión en diciembre de 2007, la economía de Estados Unidos ha perdido más de 8,4 millones de puestos de trabajo, pero el ritmo de destrucción del empleo ha disminuido en meses recientes.
El informe pronostica que la economía de EE.UU. crecerá este año a una tasa promedio del 2,5 por ciento. Después de cuatro trimestres consecutivos de contracción la economía retornó al crecimiento en el tercer trimestre del año pasado.
Según el informe, "dado lo profundo que fue el desplome económico, aún estamos lejos de una completa recuperación y aún quedan desafíos importantes".
"Dados los millones de estadounidenses que carecen de empleo, aún queda mucho por hacer para devolver la salud a la economía del país. Será necesario un crecimiento sostenido y firme del Producto Interior Bruto (PIB)" para poder recuperar los niveles de empleo previos a la crisis.
Obama ha asegurado que la economía y el crecimiento del empleo serán sus principales prioridades a lo largo de este año. Para fomentar las contrataciones ha anunciado incentivos fiscales a las empresas que creen nuevos puestos de trabajo, entre otras medidas.
El presidente estadounidense reclamó al Congreso una ley para la creación de empleo, medida que se ha visto retrasada por los temporales de nieve que han abatido a Washington en la última semana y que se sumarán a las vacaciones en el Capitolio la próxima semana.