Manchester United y Bournemouth firmaron un 4-4 inolvidable en Old Trafford, en uno de los partidos más caóticos y emocionantes de la Premier League reciente. Los de Rúben Amorim desperdiciaron tres ventajas y acabaron firmando un empate que sabe a oportunidad perdida para un equipo que aspira a consolidarse en puestos europeos.
Primer acto: avalancha roja en Old Trafford
El United salió en tromba, impulsado por un Old Trafford encendido y por el planteamiento más agresivo de Amorim, que arrancó con un sistema más ofensivo que su habitual 3-4-3. Amad Diallo abrió el marcador a los 13 minutos, cazando de cabeza un balón rechazado por Djordje Petrovic tras un centro de Diogo Dalot, culminando un dominio abrumador reflejado en 17 remates solo en la primera parte, récord esta temporada en la Premier League. Bournemouth, desbordado durante media hora, se aferró al partido hasta encontrar el 1-1 en el 40’, cuando Antoine Semenyo castigó una pérdida de Luke Shaw con un contragolpe quirúrgico, antes de que Casemiro, al borde del descanso, devolviera la ventaja local con un cabezazo en el área pequeña.
Reacción del Bournemouth y giro de guion
La segunda parte arrancó con un giro dramático: apenas 38 segundos después del saque inicial, Evanilson firmó el 2-2 tras un pase filtrado de Marcus Tavernier, aprovechando un desajuste en la zaga local. Lejos de replegarse, los de Andoni Iraola olieron el pánico en el United y voltearon el marcador en el 52’, cuando Tavernier clavó un libre directo junto al palo, culminando seis minutos de vértigo que dejaron a Old Trafford en silencio. Amorim respondió moviendo el banquillo y alterando su dibujo hacia un 4-2-4, decisión que devolvió presencia ofensiva pero expuso aún más a un equipo ya frágil en transición.
Espectáculo de golpes y respuesta final
La montaña rusa continuó con el orgullo del United: Bruno Fernandes igualó con una falta directa magnífica al 77’, ajustada a la escuadra, en una acción muy protestada por Iraola por la infracción previa señalada por mano. Dos minutos después, Matheus Cunha aprovechó un balón suelto en el área para firmar el 4-3, desatando la euforia en el Stretford End y alimentando la sensación de remontada definitiva. Pero Bournemouth volvió a demostrar por qué encadena tres visitas consecutivas a Old Trafford marcando al menos cuatro goles, cuando el joven Eli Junior Kroupi, recién ingresado, se filtró entre los centrales y cruzó el 4-4 en el 84’, coronando una actuación ofensiva tan valiente como eficaz.
Claves del partido y lectura competitiva
El 4-4 deja al United en la sexta plaza con 26 puntos, igualado con Crystal Palace, Liverpool y Sunderland, pero alimenta dudas sobre su fragilidad defensiva pese a su poderío ofensivo. Bournemouth, que vuelve a casa con un punto y un registro histórico de goles en Old Trafford, refuerza la propuesta ambiciosa de Iraola, capaz de rehacerse tras un inicio muy sufrido y de castigar cada concesión rival. Para Amorim, el encuentro se convierte en un resumen de su etapa: un equipo capaz de arrasar en fases del juego, pero que aún debe aprender a cerrar partidos si quiere transformar noches de espectáculo en victorias que consoliden su proyecto en la Premier League.




