Un grupo de médicos, residentes y comunitarios de la Zona Colonial protestaron este miércoles por la pronta terminación del Hospital Padre Billini.
Con grandes pancartas en las que podían leerse varios reclamos, como el equipamiento del centro, la habilitación de una mejor planta eléctrica y el respaldo de todos los servicios, el grupo recordó que a unos nueve meses de su reapertura el Billini ha sido abandonado por el Estado y que en la estructura complementaria que está en construcción hace tiempo que no hay obreros.
“Nosotros estamos reclamando la entrega del anexo que, supuestamente por deudas que se le tiene a los ingenieros, hace meses que se detuvo su reconstrucción. Dicen los propios ingenieros que les aseguran que no hay recursos, estamos exigiendo que se les pague y se les entregue el dinero requerido para la terminación de este hospital”, reclamó la doctora Francisca Peguero.
Efectos de la precariedad
Según la queja de los comunitarios, además de que a las ambulancias se les dificulta el acceso a la planta médica que está en funcionamiento debido a la calle cerrada por la construcción del anexo, la planta de generación eléctrica que da vida a los equipos del Padre Billini les está ocasionando daños en la salud.
“No tiene sentido, parece una planta que la mandó el mismísimo demonio”, aseguró una señora.
La queja fue apoyada por el cuerpo médico presente, quienes explicaron que los grandes volúmenes de ruido que produce el trabajo de la planta, mantienen en vilo a los pacientes y ocasiona secuelas en algunos que quizás han sufrido infartos.
“Hay una dejadez en todo el sentido de la palabra”, refirió señalando al gobierno; “pero vamos a hacer marchas, vamos a hacer parones frente al Servicio Nacional de Salud, vamos a hacer encendido de velas, de todos vamos a hacer hasta que nos hagan caso”, concluyó.