El dinero del pueblo está siendo dilapidado por el Gobierno de Danilo Medina y en estos tiempos de campaña mucho más, esto si tomamos en cuenta que desde octubre a la fecha el Plan Social de la Presidencia ha gastado más de 4,000 millones de pesos en dádivas y no ha hallado a nadie que le haga frente a la situación.
Y es que para nadie es un secreto que esta entidad está al servicio de los candidatos del gobierno, gastando, en víspera de unas elecciones municipales, nada más y nada menos que casi 1000 millones de pesos en la compra de electrodomésticos para repartirlos entre sus seguidores, ganar adeptos y engañar a la gente.
Esto es solo hablando del Plan Social, pero algo que no se le ha dado seguimiento es a Obras Públicas, que en los últimos días ha estado asfaltando hasta los callejones a donde se vaya a hacer una actividad política del PLD.
El miércoles el Partido Revolucionario Moderno requirió de la Junta Central Electoral ordenar la suspensión de los procesos de compras y contrataciones que realiza el Plan Social de la Presidencia, adscrito a la Presidencia de la República, por valor de RD$ 946 millones 801 mil 288.50 pesos.
La respuesta del Pleno de la Junta Central Electoral (JCE) fue “sugerir”, en vez de ordenar, al Gobierno suspender la compra de electrodomésticos por 380 millones de pesos que se aprobó para el Plan Social de la Presidencia el pasado 17 de enero.
En el mes de diciembre los gastos fueron exorbitantes en la compra de alimentos para las “funditas” que repartieron entre los más pobres, lo que representa una burla hacia la clase menos pudiente de la República Dominicana.
Pero ya a principios de enero, el Gobierno, a través del Plan de Asistencia Social de la Presidencia (PASP), estaba burlándose de niños y niñas de escasos recursos de todo el territorio nacional, con la entrega de juguetes, en los cuales gastó millones de pesos del erario.
Para las elecciones internas, con el fin de aplastar a Leonel Fernández, el Gobierno también repartió en alimentos y electrodomésticos, miles de millones de pesos.
La JCE no debió hacer una sugerencia, sino más bien un llamado a cumplir la Ley Electoral. Esa inadecuada intervención del organismo electoral dejó ver cuán parcializada podría estar.
Las «sugerencias» de la JCE están haciendo que la gente abra los ojos y se dé cuenta que estamos frente a un proceso maleado, amañado, irregular… El presidente de la JCE, Julio César Castaños Guzmán, debió ser más enérgico en su petición; pero no, dejó ver el refajo.
La directora del Plan Social, Iris Guaba, quiso vernos la cara de pendejos y dijo que todos los años para este mismo periodo se hacen compras similares, pero nosotros no habíamos visto que los repartos se hagan en horas de la noche, como se está haciendo en la actualidad.
El PRM lo denuncia y la JCE no hace nada; mientras que el PLD trata de comprar las elecciones municipales usando el dinero del pueblo.