El ala-pívot griego Giannis Antetokounmpo confirmó su condición de super estrella y Jugador Más Valioso (MVP) de la liga al conseguir un triple-doble con el que ayudó a los Bucks de Milwaukee a vencer la noche del jueves a domicilio por 111-117 a los Rockets de Houston.
A pesar de que fue expulsado a falta de 5:18 minutos para que concluyese el partido, Antetekounmpo dominó en todas las facetas del juego y dejó a los Bucks con una ventaja parcial de 95-101 después de haber aportado 30 puntos, 13 rebotes y 11 asistencias.
La brillantez de Antetokounmpo hizo posible que los Bucks pudiesen remontar una desventaja de 16 puntos que los Rockets, con el debut del base Russell Westbrook, parecían que tenían encaminado el partido y el triunfo en la primera parte.Junto a Antetokounmpo otros seis jugadores de los Bucks tuvieron números de dos dígitos, incluido el escolta Wesley Matthews que logró 14 tantos.
A pesar de la derrota, el debut de la nueva pareja de estrellas de los Rockets, dio un gran espectáculo con acciones individuales y de equipo que generaron el entusiasmo entre los aficionados que llenaron las gradas del Toyota Center.
Westbrook, ganador del premio MVP en el 2017, se quedó cerca de conseguir un triple doble-doble con 24 puntos, 16 rebotes y siete asistencias como líder de los Rockets. Mientras que Harden, ganador del premio de MVP en el 2018, también buscó el triple-doble al aportar 19 puntos, 14 asistencias y siete rebotes.
Ambos equipos acabaron el partido con 16 triples y los Rockets fueron mejores en el juego interior con 57 rebotes por 53 de los Bucks.
El entrenador de los Bucks, Mike Budenholzer, no pudo ayudar a Antetokounmpo cuando le pidió que solicitase a los árbitros la revisión de la jugada en la que cometió la sexta falta personal contra Capela, porque ya había utilizado otra anteriormente y el nuevo reglamento solo permite una por partido.