La Oficina de Atención Permanente de la Fiscalía del Distrito Nacional, le impuso este miércoles una garantía económica de RD$5,000 como medida de coerción, impedimento de salida y presentación periódica al tribunal, a una periodista acusada por la Empresa Distribuidora de Electricidad del Sur (EDESUR E) de hurtar el servicio eléctrico.
La comunicadora sentada en el banquillo es Altagracia Secin Hazin, acusada de cometer un fraude eléctrico en perjuicio de Edesur.
El juez suplente Elías Santini, en su decisión intima al Ministerio Público para que dentro de 3 meses presente los actos conclusivos de la investigación que considere pertinentes.
El acta de acusación señala que la señora Secin Hazin fue sorprendida por un representante del Ministerio Público y un inspector de la Superintendencia de Electricidad con un auto transformador que tenía una perita conectada, a través de la cual se prendía y apagaba el medidor para el uso ilegal de energía consumida.
El 16 de septiembre pasado, EDESUR se querelló contra la mujer, de 60 años, estipulando que en fecha 16 de septiembre pasado, una brigada de la empresa comprobó que la corriente que bajaba por los conductores de los potenciales del medidor, había un potencial que no registró consumo, de donde se dedujo que dicha fase se encontraba desconectada.
Los brigadistas que inspeccionaron, también detectaron voltaje en uno de los cables de carga, pese a que el medidor se encontraba desconectado al momento de tomar dicha medida.
Indica la acusación “que se trata de un voltaje de retroalimentación, el cual se registró entre el cable de carga que no presentó consumo y el neutro, evidenciándose un voltaje de 118.3 voltios.
Añade que la falta de voltaje en el potencial del medidor provoca que el mismo no registre los consumos, debido a que el medidor para operar de manera normal, necesita estar alimentando a su voltaje nominal.
La periodista está acusada de violar los artículos 379 del Código Penal que instituye el robo y el 124 y 125 de la Ley General de Electricidad 186-07. Es la segunda mujer en ser sometida por fraude eléctrico.