Para cuidar la casa de todos, el hogar común, la gran mansión natural donde nacemos, crecemos y nos desarrollamos, se celebra este 22 de abril el Día de la Tierra, que desde 1970, nació con el objetivo de lograr, sobre todo, que las miradas políticas se fijaran en el mal mayor que provocaba la indolente generación de basura en forma incontrolada, la producción de ruidos intensos, la tala de árboles, el deterioro, en definitiva, del aire que respiramos, con un agotamiento consecuente del agua y los alimentos , junto a otros males que hacían preguntar al Biólogo Diego Díaz Martín, Presidente de VITALIS (organización no gubernamental venezolana, cuya misión es la promoción de conocimientos, valores y conductas cónsonas con la conservación ambiental y el desarrollo sustentable), si resultaba ya necesario mudarnos de casa o apartamento: "Lo mismo estamos haciendo a escala global, con la única y gran diferencia que será muy difícil mudarnos del planeta", indicaba el científico.
Desde el 22 de abril de ese año 1970, cuando tuvo lugar la conmemoración, promovida por el senador y activista ambiental Gaylord Nelson, nació también el movimiento ambientalista moderno y poco a poco se intentó buscar el apoyo de “políticos de distintas tendencias, ricos y pobres, citadinos y granjeros, magnates y líderes sindicales”. También la creación del Día de la Tierra dio como resultado que se creara la Agencia de Protección al Medio Ambiente de Estados Unidos y a la aprobación de leyes relacionadas con el aire limpio, el agua limpia y la conservación de especies en peligro de extinción.
Dos años después, la primera cita internacional sobre el medio ambiente: la Conferencia de Estocolmo, propugnó la sensibilización de los líderes mundiales sobre la magnitud de los problemas ambientales y demandó que se instituyeran políticas para erradicarlos.
En República Dominicana, diversas instituciones y entidades celebran la fecha y recuerdan el imprescindible amor a la Madre Tierra en esta fecha que significa, más que todo, reflexión y análisis, “una fiesta que pertenece a la gente y no está regulada por una sola entidad u organismo”… “La toma de conciencia de los recursos naturales, su manejo, la educación ambiental y la participación como ciudadanos ambientalmente conscientes. Una reverencia por la vida y las fuentes de nuestro ser…"