La Asociación de Empresas Industriales de Herrera y Provincia Santo Domingo (AEIH), y la Federación de Asociaciones Industriales (FAI), plantearon este domingo la subscripción de un pacto que retome la reforma del sector eléctrico y que se adaptada al contexto económico y social del momento.
Sugieren que el acuerdo debe ser firmado por los candidatos presidenciales con mayores posibilidades de acceder al poder, sin importar quien gane las elecciones de 2012 y se retome la transformación de ese sector.
Los empresarios señalan que tanto Hipólito Mejía, como Danilo Medina han planteado puntos de vista coincidentes sobre la crisis eléctrica.
Los presidentes de las organizaciones empresariales, Wadi Cano Acra e Ignacio Méndez –respectivamente- dijeron que en el almuerzo anual de la Asociación de Industrias de la República Dominicana (AIRD), Mejía y Medina coincidieron en que no se debe postergar más la solución a ese problema.
Manifestaron que el norte de la reforma debe ser la provisión de energía de calidad, continua y a precios competitivos, así como la despolitización del sector, eliminando de una vez y por toda el distorsionante subsidio eléctrico, que este año será equivalente al 1.30% del Producto Interno Bruto (PIB), alrededor de RD$27,500 millones.
Creen que es fundamental el establecimiento de una cultura de pago para eliminar las pérdidas no técnicas que provoca el hurto y un plan de inversión que contrarreste las pérdidas como consecuencia del mal estado de las redes.
Sostienen que aunque en la actualidad se invierten RD$6,000 millones en rehabilitación de redes con fondos del gobierno y de organismos multilaterales de crédito, todavía esto es insuficiente, aunque positivo, frente a la magnitud del deterioro de las redes.
Según Cano Acra y Méndez, retrasar la solución del problema equivale a postergar el desarrollo y mantener vigente una mala calidad de vida, por los reducidos niveles de competitividad y la débil seguridad pública.
Entienden que la reforma se debe impulsar de manera creativa y, para lograrlo, primero se debe asumir el compromiso de los candidatos y que sea adoptado por la sociedad civil.