El excandidato presidencial del Partido Revolucionario Dominicano (PRD), Hipólito Mejía, se opone a las expulsiones de dirigentes de esa organización política, incluyendo a Miguel Vargas Maldonado, acusado de contribuir con el triunfo que obtuvo Danilo Medina en las pasadas elecciones.
Mejía considera: “si hemos tenido paciencia para no pelear, debemos tener paciencia para esperar”, expresó.
El ex mandatario dijo confiar en que Andrés Bautista, presidente en funciones del PRD, y Orlando Jorge Mera, secretario general, junto a otros dirigentes, conducirán al partido con comedimiento, tras asegurar que respetará lo que decida la mayoría porque considera que quien “metió la pata debe pagarla”.
Al encabezar un encuentro con los directores de juntas distritales, de quienes escuchó los pormenores suscitados en sus demarcaciones en el proceso eleccionario, Mejía precisó que conocía con antelación el plan que tenía orquestado el gobierno, pero que se resistía a creer que se cometerían tantos abusos porque a su juicio el uso de militares para quedarse con el poder estaba superado.
