Buenos Aires.- Bien temprano a la mañana de este jueves, los oficiales de control antidoping golpearon a la puerta de las habitaciones de los basquetbolistas Luis Scola y Emanuel Ginóbili para los examenes sorpresivos a los que son sometidos los atletas.
Scola escribió en su cuenta de Twitter el despertar del día jueves a las 7 de la mañana hora local. «7 am, golpes insistentes… Doping sorpresa. No entendía nada. Mi reacción inicial: ¿si me declaro culpable, me dejarán dormir un rato más?», bromeó Scola y en un segundo tuit escribió: «Todo sea por un deporte limpio, sin trampas. Pero la próxima vez… íA las 10 de la mañana muchachos! Jeje».
A Ginóbili también le tocaron la puerta para cumplir con las exigencias del departamento antidopaje del COI.
El miércoles le había tocado al tenista Juan Martín Del Potro a poco de haber llegado a Londres y a integrantes del seleccionado de handball.
