El número total de paradas en boxes ha descendido drásticamente, de las 1.058 que se llevaban contabilizadas a estas alturas en el 2011 a las 854 que llevamos esta temporada. La evolución ha ido contraria a la lógica, pues tres de los cuatro compuestos ofrecidos por Pirelli son más blandos que los del año pasado.
Si durante toda la temporada (especialmente al inicio) Pirelli ha recibido numerosas críticas por presentar una gama de compuestos excesivamente imprevisible, ahora -viendo los números- es el momento de cambiar el discurso y empezar a pensar que quizás hayan sido, por el contrario, demasiado conservadores. Si no, no tendría sentido que -después de las 18 carreras que llevamos- el número de paradas en boxes haya caído hasta en 204 (de 1.058 a 854) desde la temporada pasada a ésta. La diferencia es muy grande, demasiado, sobre todo teniendo en cuenta que los neumáticos para este 2012 se habían caracterizado inicialmente por ser capaces de ofrecer un mayor abanico de opciones y estrategias (se han reducido las diferencias entre los tipos de compuestos), y por ser, generalmente, más blandos (también los duros), lo cual -por lógica- debería haber dado lugar a un mayor número de pit-stop.
La teoría, desde luego, se desmonta comparando los datos que arroja este 2012 con los del año pasado. Prácticamente en todas las carreras de este año ha caído el número de paradas; y de hecho, sólamente en dos grandes premios (en Malasia y en Alemania) la cifra de pit-stop ha superado a la del 2011. En ambos casos, la explicación es muy sencilla: el Gran Premio de Malasia de este año se hizo con lluvia (las carreras en mojado siempre tienen más movimiento en boxes que las de seco); y en cuanto al Gran Premio de Alemania, tiene sentido porque el año pasado se hizo en el circuito de Nürburgring y éste en el de Hockenheim, donde se castigan más los neumáticos.
Quitando esas dos excepciones, la tendencia general de este año ha sido disminuir el número de paradas, hasta el punto de que se ha elevado a cinco los grandes premios donde cada piloto realiza un sólo pit-stop: Mónaco, Bélgica, Italia, La India y Abu Dhabi. Por contra, en el 2011 no hubo ninguna carrera en la que más de la mitad de los pilotos optasen por una parada y sí muchas en la que la estrategia fue de tres y hasta cuatro (este año el tope ha estado en las tres de Malasia, China, Bahréin y España).
La explicación a todo esto podría estar en que, aunque la gama de neumáticos de este año es más blanda, Pirelli está siendo muy conservador en la elección de las gomas para cada gran premio. De hecho, Paul Hembery, responsable de Pirelli Montorsport, ha reconocido que se equivocaron con los compuestos que seleccionaron en las últimas carreras.
Los neumáticos, probablemente, fueron demasiado duros en La India y Abu Dhabi. Es algo que se corregirá el próximo año.
Por otro lado, Hembery ve normal el descenso en el número de paradas sobre todo en la segunda mitad de la temporada, ya que -según él- se debe a que los equipos han empezado a comprender mejor el comportamiento de los neumáticos.
Los coches están generando más carga aerodinámica y los equipos han aprendido cómo gestionar las gomas.
