Washington.- El presidente de los Estados Unidos, Barack Obama, telefoneó al gobernador de Connecticut, Dan Malloy, para enviar sus condolencias a las familias de las víctimas del tiroteo ocurrido en una escuela de Newtown, donde han fallecido 27 personas, entre ellas 18 niños, según fuentes policiales.
Obama se comunicó también con el director de la Oficina Federal de Investigaciones (FBI), Robert Mueller, de acuerdo a declaraciones ofrecida por el portavoz de la Casa Blanca, Jay Carney, mediante rueda de prensa.
El mandatario fue informado a media mañana del tiroteo en la escuela Sandy Hook de la ciudad de Newtown, ubicada a unos 100 kilómetros de Nueva York y está recibiendo actualizaciones constantes sobre la situación.
El teniente J. Paul Vance, de la policía de Connecticut, compareció ante los periodistas y comentó que no van a ofrecer cifras oficiales de víctimas hasta que las familias hayan sido debidamente informadas.
Vance confirmó que hay «varios muertos», entre los que se encuentran alumnos y personal del colegio y agregó que el sospechoso fue encontrado muerto en el interior de la escuela.
Fuentes citadas por la cadena ABC, sostienen que el autor del tiroteo sería un hombre joven de unos 20 años que llevaba cuatro armas y un chaleco antibalas. Por su parte, Fox News indica que el sospechoso podría ser el padre de uno de los alumnos de la escuela.
Mientras, otra cadena como la NBC indica que las autoridades tienen a una persona en custodia por su posible vinculación con el tiroteo.
Los cuerpos de seguridad recibieron el aviso del tiroteo poco después de empezar las clases, sobre las 09.40 de la mañana hora local (14.40 GMT), por lo que varias unidades se trasladaron al lugar.
Varios de los alumnos de la escuela Sandy Hook fueron escoltados fuera de las instalaciones educativas por sus profesores entre gritos y sollozos.
De confirmarse los 27 muertos, la de hoy sería la segunda mayor masacre perpetrada en años recientes en un centro educativo de Estados Unidos, tras la matanza de la Universidad de Virginia Tech., en la que perdieron la vida un total de 33 personas en 2007.
En 1999 se produjo uno de los incidentes más sonados de estas características, cuando dos estudiantes de 17 y 18 años asesinaron a 23 de sus compañeros y profesores en la escuela de Columbine, en el estado de Colorado.
En julio de este año, Colorado volvió a ser escenario de una masacre cuando un joven protagonizó un tiroteo en un cine de Aurora, cerca de Denver, en el que fallecieron 12 personas y otras 59 resultaron heridas, 11 en estado crítico.
Ante insistentes preguntas de los periodistas, el portavoz de la Casa Blanca sostuvo que hoy no es el día para reabrir el debate sobre el derecho a la posesión de armas, recogido en la Constitución estadounidense.