Una nueva amenaza de diseminación de la fiebre aviar en Indonesia mantiene bajo tensión a las autoridades sanitarias en todo el país para evitar que el tráfico territorial de aves escape a la debida supervisión.
La agencia de ganadería de Java occidental intensificó el control de dicho trasiego luego de la muerte de 300 mil patos en la parte central y oriental de la isla debido a las lluvias de estación y la sospecha de un brote de la enfermedad.
El director de la entidad, T. Koesmayadi, informó que en estos momentos se investigan mediante análisis de muestras de sangre las pérdidas de varios cientos de aves en distintas regencias y ya arrojaron resultados positivos.
Sujono, responsable para la esfera, en la provincia Tulungagung, señaló que el virus de la fiebre aviar mutó del conocido H5N1 clade 2.1 a H5N1 clade 2.3, lo que significa un desafío en su seguimiento clínico.
Funcionarios de la sanidad incrementan las advertencias de prácticas higiénicas a las poblaciones, mientras se acumulan los reportes de muertes de aves en considerables cantidades.
