Como funesto para los consumidores y la población más desposeída, en opinión de expertos, resultaría la entrada en vigencia del incremento de 8 a 11% del Impuesto sobre la Transferencia de Bienes Industrializados y Servicios (Itbis), en algunos productos de la canasta básica, establecido en la pasada Reforma Fiscal aprobada en el 2012.
El aumento de precios que reciben estos elementos de la dieta básica dominicana buscaba recaudar más de RD$50 mil millones de pesos, a fin enfrentar el déficit fiscal, heredado de la administración de Leonel Fernández.
El alza se realizó de forma escalonada, y alimentos que antes no pagaban ese tributo, pasaron a amortizar de 0 a 8 % en el 2012; se prevé que sea de un 8% a 11% en 2014, un 13% en 2015 y un 16% en 2016.
A fin de disminuir el impacto de este incremento en el inicio de año, algunos de los supermercados como El Nacional, Jumbo y La Sirena anunciaron que lo asumirán durante un mes, como lo hicieron el pasado año.
Sin embargo, la mayoría del comercio lo aplicará de forma paulatina, como manda la nueva ley fiscal por lo que la ampliación del Itbis al café, azúcar, chocolate, yogurt, aceite, mantequilla, entre otros, obliga a los consumidores a reajustar sus presupuestos.
Opinan expertos
El economista Pavel Isa Contreras consideró que la medida restringirá una vez más el poder adquisitivo de los más pobres, quienes tendrán que pagar una cuota importante de la reforma.
Para el experto, los recursos obtenidos a través de la política impositiva oficial no tendrán un impacto positivo en la calidad de vida de la nación, sino que pasarán a engrosar el pago de la deuda, la cual traga cada vez más recursos del fisco.
Cuestionado al respecto, el asesor de la Federación de Comerciantes y Empresarios de la República Dominicana, Ricardo Rosario, señaló que la entrada en vigencia de esa extensión podría tener consecuencias negativas para la población, por lo que llamó al Gobierno, industria y al comercio a buscar una solución para evitar una aplicación indebida de la Ley 253-12.
Rosario destacó que con esa disposición se aplicará la política del redondeo o fraccionamiento y productos que deben subir 0.30 ó 0.40 centavos terminarían aumentando un peso, mientras que otros que serían afectados con 2.00 y 3.00 pesos, llegarían hasta 5.00, lo que se traduce en perjuicio del consumidor final.
“Esa estrategia de redondeo que se aplica en la República Dominicana, afectará considerablemente a los consumidores”, precisó.
Dijo que la única forma de evitar eso, sería que el gobierno envíe un anteproyecto de ley, dejando sin efecto la mesura sobre Reforma Fiscal.
Instó a las autoridades del Gobierno conjuntamente con las distintas federaciones a sentarse en la mesa del diálogo, a fin de iniciar una campaña para la no aplicación del mecanismo de redondeo, “pues se aplica al ojo por ciento y se hace de una forma inmisericorde”, reflexionó.
Sostuvo que hay algunos casos donde pueden ser asumidos, una parte por el comercio y otra por la industria, porque hay productos que se les pierde y a otros les gana.
“Pero, la sumatoria de todo debe ser la conquista de tener un consumidor más holgado y menos perjudicado”, concluyó.
