Supuestos combatientes islamistas mataron a al menos 90 personas en las primeras horas de la mañana del domingo en una lejana aldea del noreste de Nigeria, dijeron testigos.
Los hombres armados del grupo islámico Boko Haram rodearon la aldea de Izge, cerca de la frontera con Camerún, ametrallando la localidad, provocando explosiones y quemando decenas de casas, afirmaron.
«Mientras hablo contigo ahora, todos los cuerpos de las víctimas aún están tirados en las calles», dijo a Reuters vía telefónica el residente de la localidad, Abubakar Usman.
«Escapamos sin enterrarlos, temiendo que los terroristas aún estuvieran escondidos en los matorrales», agregó.
El comisario de policía del estado de Borno, Lawal Tanko, confirmó el ataque, pero dijo que no tenía detalles sobre víctimas. Otro testigo, Lawan Madu, afirmó que cientos de residentes habían huido de la aldea.
El presidente Goodluck Jonathan ordenó que tropas adicionales fueran al noreste de Nigeria en mayo de 2013 para intentar aplastar a los insurgentes, que quieren instaurar un Estado islámico independiente en el norte de Nigeria, de mayoría musulmana, donde han matado a miles de personas.
Pero los islamistas simplemente se replegaron al área alejada y montañosa de Gwoza, en la frontera con Camerún, desde donde han seguido realizando ataques mortales dirigidos cada vez más contra civiles.
Jonathan enfrentará elecciones en un año y la persistencia de la insurgencia de cuatro años y medio de Boko Haram pese a una costosa operación militar contra el grupo sigue siendo un gran dolor de cabeza.
La semana pasada, combatientes de Boko Haram que viajaban en camiones pintados con colores militares mataron a 51 personas en un ataque en el área del gobierno local de Konduga.
