Un tribunal egipcio ilegalizó el martes todas las actividades de Hamás en el país, dijo un juez, en otra señal de que las fuerzas de seguridad planean restringir al grupo armado palestino que controla la vecina Franja de Gaza.
Hamás nació del movimiento egipcio de los Hermanos Musulmanes, que ha sido declarado grupo terrorista por el Gobierno egipcio sostenido por las Fuerzas Armadas y ha sido objeto de una dura represión desde que los militares derrocaron a uno de sus dirigentes, Mohamed Mursi, de la presidencia del país en julio del año pasado.
«El tribunal ha ordenado la prohibición del trabajo y de las actividades de Hamás en Egipto», dijo a Reuters el juez, que pidió permanecer en el anonimato.
Las autoridades egipcias consideran a Hamás una importante amenaza para la seguridad, acusándolo de apoyar a los insurgentes islamistas inspirados en Al Qaeda que actúan en la península de Sinaí, algo negado por el grupo palestino.
El tribunal también ordenó el cierre de las oficinas de Hamás en Egipto, dijo a Reuters uno de los jueces que supervisa el caso.
Hamás condenó la sentencia, y dijo que va contra la causa palestina.
La causa fue presentada el año pasado por un grupo de abogados egipcios, que pedían la ilegalización de Hamás y su designación como organización terrorista.
El plan de minar a Hamás de los dirigentes militares egipcios incluye trabajar con los rivales políticos palestinos de Al Fatah y apoyar actividades contra el grupo armado en Gaza, según cuatro responsables de seguridad y diplomáticos.
Desde que se hicieron con el poder el verano pasado, han asfixiado la economía de Gaza destruyendo la mayor parte de los 1.200 túneles utilizados para introducir comida, armas e incluso coches en el pequeño territorio costero, sometido al bloqueo de Israel.
