Nueva York.-Todos quieren encontrar la próxima estrella cubana. Primero fue Yoenis Céspedes. Luego fue el turno de Yasiel Puig. ¿Seguirá José Dariel Abreu los pasos de sus compatriotas?
Los Medias Blancas de Chicago esperan que así sea. Por algo desembolsaron 68 millones por seis años para adquirir al primera base que desertó de la isla el año pasado tras hacerse notar en el Clásico Mundial de béisbol.
“Es un bateador completo, hace contacto en cualquier parte del plato, a todas partes del terreno. Y no es alguien que está pensando todo el tiempo debe sacar la bola fuera del parque”, dice Robin Ventura, el mánager de los Medias Blancas.
El monto de su contrato es el más grande que se otorga por primera vez a un jugador internacional, no nacido en Japón, por parte de un club de Grandes Ligas.
Compañero de equipo de Puig en Cienfuegos, Abreu confesó que uno de sus pasatiempos es ver en casa videos de Miguel Cabrera bateando.
Sabe que de él se espera que emule a Céspedes y Puig con un primer año igual de notable, pero trata de mantener a raya las expectativas: “No lo tomo que debo hacer lo que ellos han logrado, más bien admiro lo que hicieron y eso me sirve de inspiración”, dijo.
