Falta reglamento impide aplicación Ley contra robo metales

Las tapas de filtrantes, los cables de teléfonos, eléctricos, barandillas de protección de las autopistas y los soportes de los puentes, así como otro tipo de hierro, aluminio, cobre y aleaciones, son de los metales favoritos de los compradores y vendedores, quienes lo utilizan en el negocios de la exportaciones de desechos sólidos en República Dominicana.
 
Al caminar por las calles o avenidas del país es notorio observar un filtrante sin tapa, de igual forma resulta común enterarse por los medios de comunicación de las diversas quejas de las comunidades por la sustracción de los cables eléctricos y teléfonos entre otros.
 
Igualmente pasa con los protectores y señales de aluminio de las carreteras, las cuales son despojadas de manera sistemática. También las querellas por el robo de baterías son contantes.
 
Este tipo de negocios está a la vista de todos; cualquiera puede tener un almacén sin supervisión de las autoridades, mientras que las denuncias de la población se queda en los archivos muertos de la Policía Nacional.
 
El negocio
 
En la República Dominicana existían alrededor de 19 empresas constituidas que podían enviar metales a decenas de países; pero, en la actualidad sólo siete están autorizadas, según informaciones del Centro de Exportación e Inversión de la República Dominicana (CEI-RD).
 
En el país existe un mercado informal incontrolable de la comercialización de los metales, debido que hasta una persona en un triciclo o una camioneta puede adquirir chatarras, cobre y aluminio sin regularización y ser parte del negocio.
 
Las guagüitas anunciadoras son el gran motor de las compras y ventas informales y no hay nada que se le salve si tiene metal como es el caso de las neveras, estufas, lavadoras, tanques de calentadores de agua, carros y tarjetas de computadoras, por su cantidad piezas de aluminio y cobre.
 
Según investigaciones en algunos puestos de ventas de metales, el hierro se vende por kilo a unos RD$9,000 la tonelada; el aluminio a RD$22 la libra, y el níquel a RD$23 ó 24 la libra y en el caso de las baterías de inversor la compran hasta a RD$800.
 
Datos económicos
 
Según fichas obtenidas del año 2013, cinco de los 14 tipos de desperdicios metálicos que exporta el país mueven un promedio US$73 millones por año; pero, también se multiplican las denuncias de robo de metales pertenecientes a estructuras públicas y privadas.
 
Los registros estadísticos del Centro de Exportación e Inversión (CEI-RD), muestran que desde 1 de enero del 2005 hasta el 31 de diciembre del 2011, el monto generado por la venta de desperdicios de hierro, acero, cobre, aluminio, bronce y zinc, pasó de generar US$12.4 millones a US$155.4 millones, para una variación positiva de 1,149.5 por ciento.
 
Ley sin reglamento
 
El diputado Carlos Gabriel García, autor de la Ley que Regula la Recolección, Almacenamiento Exportación de Metales en la República Dominicana, resaltó que el objetivo del código es criminalizar la sustracción de las instalaciones metálicas del país.
 
García se quejó de que pese a la promulgación de la Ley por el Poder Ejecutivo, diversos funcionarios de instituciones del Estado, en conjunto con una comisión de la Cámara de Diputado, no han presentado el reglamento para su aplicación.
 
Reveló que dicha comisión tenía un plazo de 90 días y han pasado meses, por lo que llamó al presidente de la Cámara de Diputados, Abel Martínez Durán, a convocar a los ejecutivos de los diferentes ministerios, directores y congresistas para que la legislación entre en vigencia lo antes posible.
 
El legislador resaltó que es necesario que la Ley empiece aplicarse para que todo el peso judicial caiga contra los que de manera indiscriminada han sustraído piezas valiosas de los monumentos que honran a nuestros héroes, así como a los que roban las barandillas de los puentes y las tapas de los filtrantes.
 
Dijo que la ley prevé condenas considerables y no que la persona salga con una simple fianza como ha estado sucediendo: “Esta ley, ya promulgada, criminaliza esa acción delictual con condena de 5 a 20 años a la persona responsable de robo de metales. Hago un llamado para que ese reglamento sea puesto en vigencia”, externó el congresista.
 
Crea en empresa
 
Al ser abordado por Multimedios DominicanosHoy sobre las posibilidades de crear una industria que procese los desechos sólidos en el país, con el objetivo hacer varillas para la construcción de vivienda y otras infraestructuras, el legislador por el Partido Revolucionario Dominicano (PRD), Carlos Gabriel García, indicó que está de acuerdo con la promoción de ese tipo de empresa; pero, que el Estado tendría que intervenir.
 
“Antes en el país Metaldom procesaba desechos sólidos para fundirlo y crear varillas y otros metales de la construcción, pero parcialmente han abandonado esa rama por los altos costos de producción. Yo espero que el Estado dominicano pueda promoverse una empresa de esa naturaleza en que podamos tener la capacidad para fundir y elaborar una serie de productos con esos desperdicios metálicos”.
 
No obstante, acotó García que la República Dominicana no puede seguir siendo una potencia regional en la exportación de cobre, “si no somos productor de ese metal”.
 
Venezuela
 
Recientemente, el gobierno de la República Bolivariana de Venezuela anunció un plan de reciclaje para convertir los vehículos inservibles o abandonados en material de construcción.
 
Según las autoridades venezolanas, toda esa chatarra será convertida en varillas de acero corrugado para su utilización en la construcción. El objetivo final de esos materiales será su uso para implementar el programa de construcción de viviendas de protección oficial Gran Misión Vivienda creado por el difunto presidente Hugo Chávez.
 
Un total de 6.634 vehículos inutilizados en estacionamientos de guarda y custodia del estado Lara, han sido transformados en cabillas para la construcción de casas y edificios de la Gran Misión Vivienda Venezuela (GMVV), política pública habitacional impulsada por el Gobierno nacional.
 
Son muchos los millones de pesos que entran al Estado dominicanos por el concepto de importación de metales; pero, son más los gastos asumido por la población, cuando de los impuestos que paga al fisco tienen que ser utilizado para comprar nuevamente las protecciones de las carreteras, las tapas de hoyos filtrantes, los cables eléctricos, entre otras piezas que son sustraídas.

Compartir esta publicación:

WhatsApp
Facebook
X
LinkedIn
Pinterest