Feminización Sida, más en mujeres bajo nivel educativo

“Según las estadísticas, el incremento del número de mujeres afectadas por esta enfermedad impacta sobre todo a las más jóvenes y con bajo nivel educativo”, expresó Alejandrina Germán, ministra de la Mujer, durante el Octavo Seminario Políticas Públicas, Género, Mujer y VIH- Sida, que durante los días 23 y 24 del pasado mes tuvo lugar en la capital dominicana y donde trascendió el tema de la feminización del Sida en el país.
 
La violencia contra la mujer, basada en su condición de género, ha incrementado su vulnerabilidad para adquirir VIH, al tiempo que esta realidad las discrimina aún más, argumentó Bethania Betances, representante del Programa Conjunto de las Naciones Unidas sobre el VIH/SIDA (Onusida), durante su exposición titulada: Vínculo de la violencia basada en género y VIH.
 
Betances especificó que las mujeres víctimas de violencia por sus parejas tienen más posibilidades de ser infectadas por el VIH: “Están más propensas a sufrir discriminaciones y se consideran culpables”, explicó.
 
Para la especialista, resulta imprescindible intensificar los programas de protección contra la violencia sexual y el acceso a servicios universales integrales: “Acciones normativas traducidas en inversiones financieras programáticas, capaces de transformar normas de género perjudiciales y visibilizar más la voluntad política en la ejecución de dichos programas”, sostuvo durante su exposición final, que concluyó con frases de Michel Sidibé, director ejecutivo de Onusida: “La única manera de crear un cambio social a través de la no violencia”.
 
Por su parte, el director ejecutivo del Consejo Nacional para el VIH y el Sida (Conavihsida), Víctor Terrero, se refirió a los costos de medicamentos, actualmente cubiertos por el Estado dominicano en la Respuesta Nacional, e indicó que los antirretrovirales serán garantizados a partir de 2015. Aseguró que trabajan en el anteproyecto de la Ley Anti-estigma y Discriminación en la República Dominicana, pieza legislativa que busca que las personas que viven con el VIH  no sean excluidas por ser portadores del virus, o por su preferencia sexual.
 
En el discurso inaugural, la ministra Alejandrina Germán explicó que aunque las mujeres han  logrado importantes conquistas en múltiples sectores de la vida nacional, aun siguen  afectadas por razones de inequidad y desigualdad, lo que las hace más vulnerables ante condiciones que afectan su salud y su desarrollo individual, como es el caso del contagio con VIH.
 
Se refirió, además, a la interrelación mostrada por estudios internacionales y nacionales entre la violencia contra las mujeres  y el VIH/Sida, “por lo que este vínculo es uno de los ejes de intervención en el marco de los trabajos que estamos realizando desde el Ministerio de la Mujer con el apoyo del Conavihsida”, precisó Germán.
 
En tal sentido se refirió a los planes estratégicos y operativos que el  Ministerio de la Mujer ha integrado en el abordaje del VIH como tema prioritario que se integra en el Proyecto “Hacia Políticas Públicas Integrales e Integradas: Por el Derecho de las Mujeres a la No Discriminación, Prevención y Atención en Materia de VIH y Sida, cuyo propósito es lograr que la respuesta nacional  a esta epidemia  sea trabajada  con un enfoque centrado en los derechos humanos y con perspectiva de género”.
Única vacuna
Bajo el lema “Trabajando por la igualdad y la equidad”, el evento contó también con voces como las del director de la Dirección General de Control de Infecciones de Transmisión Sexual y Sida (Digescitss) Luis Ernesto Feliz Báez, quien expuso que según el orden cromosómico de hombres y mujeres, aunque aquellos  resultan más vulnerables al VIH, por ser ellas las receptoras del semen, su carga viral  es mayor.
 
“Sin embargo, es la vulnerabilidad social la que más afecta a las mujeres-observó-, sobre todo las de escasa o ninguna educación; y menos remuneración salarial. Todo esto limita su capacidad de negociación en la pareja e incrementa los riesgos. La educación es la única vacuna social con que cuenta el mundo para combatir el VIH”, sentenció finalmente el director de Digescitss.
 
Germán intervino con el criterio de que: “Podemos hacer  todos los esfuerzos posibles; pero, no vamos a superar este problema si no educamos y pasamos del discurso a la acción”.
 
Agregó que muchos políticos emplean el lenguaje de género, “pero del dicho al hecho, hay mucho trecho”, subrayó y puntualizó la necesidad de instruir también a los hombres, “pues las mujeres solas no vamos a lograr esa igualdad de derechos y oportunidades”, dijo.
 
 
Otras intervenciones, como la de la consultora Alina Ramírez, aportaron datos estadísticos y resultados de diagnóstico de Género; en tanto que diversos contenidos abarcaron experiencias y lecciones aprendidas por personas que viven con VIH y Sida.
 
Las investigaciones reflejan que de las más de 45 mil personas que viven con el virus, el 51% son mujeres. En la nación dominicana la epidemia se denomina “concentrada”, no generalizada, lo que significa que la prevalencia es alta en algunos sitios; pero baja en otros.
 
Una provincia con altos riesgos
Carmen Doñé, encargada de la oficina provincial de la Mujer en San Cristóbal, conversó sobre la preocupación que impera en esa provincia, la tercera más poblada del país, y ubicada a 26 kilómetros de la capital, debido al alto número de personas que viven  con VIH, quienes aunque reciben los medicamentos gratuitos y los antirretrovirales en el hospital regional Juan Pablo Pina, son más susceptibles a complicaciones, debido a su condición de extrema pobreza, la cual limita su recuperación y expande los contagios.
 
“Se necesitan programas más fuertes y continuos, que den seguimiento a estos pacientes, sobre todo debemos aumentar los encuentros con la población más joven, para que aprendan cómo cuidarse en sus relaciones sexuales, que sepan utilizar condones y que tengan conciencia de la enfermedad”.
 
Doñé menciona la limitación de recursos como factor principal que impide abarcar a todo el territorio: “No sabe cuánto nos preocupa esto, porque necesitamos sensibilizar  a las adolescentes, sobre todo, y por eso preparamos charlas sobre educación sexual y reproductiva para menores de 19 años; pero no podemos llegar a la mayoría de los centros educativos, iglesias e instituciones. A veces les atendemos en nuestras propias casas, pero no es suficiente.”
 
Obstáculos
Carmen Pérez, del Ministerio de la Mujer, quien intervino en el Seminario con el tema titulado: ¿Por qué políticas públicas con enfoque de género?, enfocó entre los principales obstáculos que enfrenta la sociedad dominicana para el abordaje de la problemática la falta de compromisos y voluntad política: “No son suficientes los recursos, ni existe la sensibilización sobre género. Tampoco contamos con un personal de recursos humanos capacitado y ni hablar del clientelismo, ese por el cual los políticos prefieren acciones puntuales que cosechan votos y lo demás queda como perspectiva para ser cumplido a largo plazo”.
 
Vacíos legales y reglamentarios debilitan la protección de víctimas de violaciones sexuales, trata y tráfico de personas; lo que incrementa las manifestaciones de violencia contra la mujer dominicana y su propensión a adquirir el virus VIH o padecer Sida, tal y como trascendió en este Seminario Políticas Públicas, Género, Mujer y VIH- Sida,  cuyo objetivo esencial fue este de sensibilizar a los hacedores de políticas públicas sobre la necesidad de incorporar la perspectiva de género en los planes, programas, y lineamientos estratégicos para abordar, prevenir y tratar la problemática.

Compartir esta publicación:

WhatsApp
Facebook
X
LinkedIn
Pinterest