Dos supuestos palestinos armados con hachas y cuchillos mataron a cuatro personas en una sinagoga de Jerusalén el martes antes de ser abatidos a tiros por la policía, dijo la fuerza policial y los servicios de emergencia de Israel, en el ataque más mortífero de este tipo en la ciudad en años.
El ataque se produjo poco después del amanecer en un barrio ultraortodoxo de Jerusalén Oeste. Fotos publicadas en internet por un portavoz del Ejército israelí mostraron a un hombre en un chal de oración judío muerto y tendido en el piso, una cuchilla de carnicero ensangrentada tirada en el suelo y mesas de oración volcadas.
«Estamos considerando esto un ataque terrorista», dijo el portavoz de la policía Micky Rosenfeld. Los servicio de ambulancias de Israel dijeron que al menos ocho personas resultaron gravemente heridas.
La policía dijo que al menos uno de los atacantes era de Jerusalén Este, la parte predominantemente palestina de la ciudad.
Reportes de radio palestinas describieron a los atacantes como «mártires» y el grupo islamista Hamas elogió el ataque.
«Hamas pide la continuación de las operaciones de venganza y hace hincapié en que la ocupación israelí es responsable de la tensión en Jerusalén», dijo el portavoz de Hamas, Sami Abu Zuhri.
El primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, culpó del ataque a Hamas y al presidente palestino, Mahmoud Abbas, a quien acusó de instar a los palestinos a la violencia.
«Este es un resultado directo de la incitación liderada por Hamas y Abu Mazen, la incitación que la comunidad internacional ha estado ignorando irresponsable», dijo en un comunicado.
