Ciudad Mujer es un modelo de política pública que sirve para cualquier lugar del planeta, afirmó en esta capital la Secretaria de Inclusión Social de El Salvador, Vanda Pignato.
A través de ese programa social se han atendido más de 629 mil 160 salvadoreñas y se han brindado más de un millón 654 mil 155 servicios a las féminas de ese país centroamericano.
Pignato vino a divulgar ese aporte al Foro Dominicano-Salvadoreño de Combate a la Violencia contra la Mujer que tuvo lugar en Santo Domingo del 24 al 27 de noviembre.
La presentación de esa iniciativa fue hecha por ella en ocasión del Día Internacional de la No Violencia contra la Mujer establecido por la ONU en homenaje a las hermanas Patria, Minerva y María Teresa Mirabal, asesinadas por la tiranía trujillista el 25 de noviembre de 1960.
Después de dictar su conferencia «Realidades sobre la situación de la violencia contra las mujeres y propuesta de abordaje integral: el caso de Ciudad Mujer», la ex primera dama salvadoreña accedió a conceder una entrevista exclusiva a Prensa Latina que a continuación ofrecemos.
Prensa Latina: ¿Qué hizo el gobierno de Mauricio Funes (2009-2014), y qué hace el actual presidente Salvador Sánchez Cerén, a favor de los derechos de la mujer salvadoreña?
Vanda Pignato: Primero tenemos que ir atrás. Antes de la llegada de Mauricio Funes tuvimos 20 años de gobierno de la Alianza Republicana Nacionalista (Arena), un partido de derecha donde no solo las mujeres sino también los otros sectores de la sociedad estuvieron excluidos de las políticas públicas.
En esos 20 años Arena gobernó para una pequeña élite y excluyó a las grandes mayorías de las políticas públicas, es decir, a las mujeres, los adultos mayores, los niños y niñas, los adolescentes, la comunidad de la diversidad sexual.
Con la llegada del presidente Mauricio Funes se crea la Secretaría de Inclusión Social que tiene como objetivo generar políticas públicas de inclusión social con enfoque en derecho.
Es a partir de allí que se empieza a priorizar a esos grupos tradicionalmente excluidos para que sean visibles y prioritarios en las políticas públicas. Y el presidente Salvador Sánchez Cerén ha seguido ese mismo plan con la idea de fortalecerlo y de ampliarlo.
Como parte de esa política surgió el programa Ciudad Mujer. Es una misma infraestructura donde participan 17 instituciones del Estado. La idea es facilitar los servicios para las mujeres. El acceso a los servicios era muy difícil para ellas.
Algunas nunca se hicieron examen de cáncer de mama o una citología, nunca tuvieron acceso a un odontólogo o ir a la Procuraduría General de la República a gestionar alimentos para sus hijos cuando fueron abandonadas por el esposo sin ninguna ayuda.
Entonces en la misma infraestructura están 17 instituciones del Estado que trabajan de forma articulada, cada una en el marco de sus propias competencias, pero rompiendo la fragmentación que es tan usual en el servicio público, para facilitar la vida de la mujer, y así, en una sola mañana puede resolver lo que demoraría meses.
Hay además cuatro áreas de atención: salud sexual y reproductiva, prevención y atención a la violencia de género, autonomía económica (pues para romper el ciclo de la violencia hay que buscar la independencia financiera de las mujeres) y una sala de cuidado infantil.
Ese último es un servicio muy importante porque le cuidamos a sus hijos e hijas porque las mujeres no pueden abandonar a sus pequeños para hacer esas actividades. Las mujeres priorizan a sus hijos y por último están el cuidado de su cuerpo, su salud y las reivindicaciones de sus derechos.
Prensa Latina: Ustedes llevan más de cuatro años trabajando a favor de los derechos de la mujer en la sociedad salvadoreña, un escenario considerado entre los más violentos de Centroamérica. Después de ese lapso, ¿cuál es la reacción que se observa en la sociedad salvadoreña frente a hechos como los feminicidios?, ¿hay más conciencia, más condena ante estos actos de barbarie?, ¿hay más justicia a favor de las mujeres?
Vanda Pignato: En primer lugar hay más denuncia. Eso significa que hay más confianza en el Gobierno. Porque antes las mujeres no confiaban en el Gobierno, no denunciaban.
No obstante, el cuello de botella en El Salvador es el Poder Judicial. Aún impera la impunidad en ese sector. Hay muchos jueces y fiscales muy honestos y competentes, pero un pequeño número no lo son, y eso impide que haya un acceso a la justicia para las mujeres y acaba prevaleciendo la impunidad. La impunidad lleva un mal mensaje al agresor y ese es el peor problema que ahora estamos viviendo.
Los efectos de Ciudad Mujer en la sociedad salvadoreña han sido grandes. Tiene una aprobación del 90 por ciento de la población según la última encuesta Gallup. Es el único proyecto de política pública de género en América Latina que tiene tal índice de aprobación. En otros países esos proyectos sufren rechazo.
Prensa Latina: Como secretaria de inclusión social salvadoreña, qué aporte ha hecho Usted a este Foro Dominicano-Salvadoreño de Combate a la Violencia contra la Mujer? ¿Qué experiencias ha transmitido?
Vanda Pignato: Yo vine a hablar sobre el modelo de política pública que es Ciudad Mujer. Es un modelo que sirve para cualquier lugar del planeta. Obviamente, guardando las diferencias culturales de cada país.
El Gobierno de Japón está interesado en implementar el modelo y ahí la cultura es diferente, debe hacerlo a su medida. La presidenta de Brasil, Dilma Roussef, va a aplicarlo con otro nombre, se va a llamar Casa de la Mujer Brasileña. El presidente Enrique Peña Nieto, de México, también quiere utilizarlo y ahí tendrá un componente más indígena.
Pero ciudad Mujer es un modelo que sirve a cualquier parte y yo vine a hablar sobre él e intercambiar también las buenas experiencias. Y eso es muy positivo porque infelizmente los organismos de integración centroamericana no hacen que nosotros conozcamos lo que hacemos los propios países de la región en esta materia.
Aquí se conoce más de los modelos de Estados Unidos, de Francia, de Holanda, que de lo que se hace en República Dominicana, Costa Rica o Nicaragua. Tenemos que conocernos más, estar informados de las cosas buenas que se están haciendo y ese intercambio ayuda y fortalece a nuestras sociedades.
*Corresponsal de Prensa Latina en República Dominicana
