¿Un yogur helado preparado en sólo 5 minutos? Desde luego, está riquísimo y es realmente sano. Ideal para los más pequeños y para esas meriendas en las que siempre vas acertar. ¿Quieres conocer la receta? Toma nota entonces, te encantará.
Yogur helado de frambuesa, fácil y saludable
Con la simple imagen ya se nos hace la boca agua. Pero respiremos tranquilas, este helado no dispone de apenas grasas y lo que es aún mejor, es completamente natural, carece de conservantes y esos químicos artificiales que añaden habitualmente a los helados industriales, donde nos seducen con sus llamativos colores. Este helado está elaborado a base de yogur natural, sin azúcar.
Recordemos los grandes beneficios del yogur natural:
Dispone de Lactobacillus, esos microorganismos beneficiosos para nuestros intestinos, capaces de protegerlos y fortalecerlos.
El yogur natural dispone en la mayoría de las veces mayor cantidad de calcio y más proteínas que un vaso de leche.
Veamos ahora los beneficios de las frambuesas:
Las frambuesas son muy ricas en fibras y vitamina C, y aquí viene lo mejor, disponen de muy-muy pocas calorías.
Disponen además de minerales como el potasio, magnesio o calcio.
Son un tesoro natural en fibras, estupendas para prevenir el estreñimiento y problemas con el tránsito intestinal.
Son además muy ricas en antioxidantes y en flavonoides, luchando así contra el envejecimiento y mejorando además el sistema circulatorio.
¿Qué necesito?
2 tazas de frambuesas congeladas (las puedes encontrar fácilmente en el supermercado)
4 cucharadas de miel
Un yogur natural (No azucarado, ¡es más saludable!)
El jugo de medio limón.
2 galletas de avena
¿Cómo lo preparo?
Es muy fácil. Lo primero que haremos es coger un bol o un recipiente amplio de cristal. Introducimos en él las frambuesas (no deben descongelarse) y después ponemos la taza de ese yogur natural. Ten en cuenta que si sabes realizar tú misma yogur natural será mucho más saludable. Pon los dos ingredientes en bol y después coge la batidora.
¿Qué haremos ahora? Batir la mezcla durante 5 minutos. Verás que te cuesta un poco dado que las frambuesas están congeladas, pero es ideal, ya que así va cogiendo más consistencia y además, quedarán tropezones que estallarán en nuestra boca llenas de esa agradable acidez. Añade ahora el jugo del medio limón.
Verás que está lista justo cuando notes que la textura es ya muy cremosa.
¡Ya tienes listo tu yogur helado! Así de fácil, pero ahora tenemos dos opciones. Puesto que las frambuesas estaban congeladas y el yogur fresco, estará perfecto para servirlo. Pero si quieres que esté más helado, no tienes más que ponerlo en el refrigerador durante media hora. Estará ideal.
¿Y cómo lo servimos? Toma nota, lo que haremos es repartir el yogurt helado en dos amplias copas y por encima, dejar caer dos cucharadas de miel en cada copa. Por último rompe a trocitos las galletas de avena y repártelas en ambos helados. ¿Te imaginas ya lo delicioso que está? Debes probarlo. Como curiosidad te diremos que este yogur dura en tu refrigerador en buen estado alrededor de diez días. Un postre o una merienda ideal muy saludable.