El Momotombo, un volcán de más de 1 200 metros de altura, ubicado en el departamento de León, marcó hace cientos de años la historia nicaragüense y constituye un atractivo para los visitantes nacionales y foráneos.
Parte integrante de la Ruta Colonial y de los Volcanes, promovida por el Instituto Nicaragüense de Turismo (Intur) con el apoyo de la Unión Europea, el cono se relaciona estrechamente con la antigua León de Nagrando, primera capital de este país.
En 1610, los habitantes de aquella urbe fundada por el conquistador español Francisco Hernández de Córdoba, protagonizaron un éxodo hacia la actual ciudad de León, temerosos de los sismos y las erupciones del coloso. Conocida como la Pompeya de América, la ciudad fue cubierta por las cenizas, arena y demás elementos expulsados por la estructura durante siglos, hasta que en 1967 un grupo de investigadores logró localizarla bajo la capa de materiales.
Sus vestigios, ligados al lago Xolotlán y al volcán que se levanta imponente en la otra orilla, son apreciados ahora en el Sitio Histórico Ruinas de León Viejo, otro de los destinos más atrayentes para los visitantes en esta parte del mundo. Un poco más acá en la línea del tiempo, aunque en el ámbito de la poesía, el Momotombo también tiene su espacio, específicamente en la obra del Padre del Modernismo, Rubén Darío, el más alto representante de las letras en este país centroamericano.
«Y llegué y vi en las nubes la prestigiosa testa/de aquel cono de siglos, de aquel volcán de gesta», describe Darío en el mismo poema en que lo define como un «coloso negro ante el sol, maravilloso de majestad».
La edad exacta del Momotombo no se conoce -dice en conversación con Prensa Latina el asesor del Instituto Nicaragüense de Estudios Territoriales, José Armando Saballos-, pero sí que se formó en los últimos 10 000 años.
Según los expertos, la actividad eruptiva más antigua registrada ocurrió aproximadamente en el año 2 550 Antes de Nuestra Era y, desde entonces, se contabilizan 28 grandes explosiones, la más reciente en 1905.
En ese año, cuenta el especialista, el volcán derramó un flujo de lava basáltica que recorrió casi 4 200 metros desde el cráter. Actualmente, los parámetros que vigilamos, como gases y temperatura, no nos muestran un cambio en la actividad del volcán, pensamos que todavía no debemos preocuparnos por eventos grandes en el coloso, señaló Saballos.
La belleza y la historia del cono, que puede ser escalado por los visitantes, se unen a otras iniciativas en el ámbito turístico impulsadas desde la comunidad de Puerto Momotombo, del municipio de La Paz Centro, también incluidas en la Ruta Colonial y de los Volcanes.
Read more at: http://www.caribbeannewsdigital.com/noticia/momotombo-una-experiencia-unica-por-las-rutas-turisticas-de-nicaragua




