Las lluvias dejadas por la tormenta Erika a su paso por el país mejoraron significativamente los embalses de diez presas, lo que permitirá que las autoridades aumenten de tres a cinco días el suministro de agua para la agricultura de las provincias San Cristóbal y Peravia.
Un total de 34 millones de metros cúbicos aportó la tormenta Erika a los embalses de la cuenca Ozama Nizao, es decir San Cristóbal y Peravia, que ayudará a suministrar agua para consumo humano durante 24 horas. Las presas que han registrado mayor volumen del líquido son: Valdesia, Jigüey, Aguacate y el contraembalse de las Barías.
El presidente del Observatorio del Agua, y director del Instituto Nacional de Recursos Hidráulicos (INDRHI), Olgo Fernández, explicó que esperan más lluvias en el presente mes para seguir mejorando el servicio a la ciudadanía.
“Tenemos una reserva significativa en este momento, además a esa cuenca le están entrando de manera permanente alrededor de unos 10 metros cúbicos por segundo, lo que indica que con el servicio que damos, vamos a seguir aumentando la reserva”, sostuvo.
Indicó que se han registrado mejoría en la cuenca Yaque del Sur, desde Azua, Barahona, Lago Enriquillo y Duvergé, con una mejoría en la Presa de Sabana Yegua por la entrada de 15 metros por segundo de agua a ese embalse.
Además, ha experimentado mejoría la presa de Sabaneta en San Juan de la Maguana, Hatillo en Cotuí, con 24 metros cúbicos por segundo y con tendencia a optimizar.
Mientras se mantienen en rojo las presas de Tavera y Monción en la región nortey noroeste debido a las pocas lluvias en esa zona. Entre tanto, ha sido superada la etapa crítica de los embalses Nizao-Najayo, Hatillo, San Juan y Sabana Yegua.