La Revolución Bolivariana de Venezuela se está autodestruyendo y no es por culpa de Colombia, dijo el miércoles el presidente Juan Manuel Santos, frente las críticas de su homólogo Nicolás Maduro, quien respondió exigiendo diálogo entre los dos países enfrascados en un conflicto fronterizo.
Maduro consideró que las declaraciones de Santos constituyen un «error» y las «peores ofensas» contra su país en los últimos 200 años, no obstante, propuso que las cancillerías de Caracas y Bogotá trabajen en un pacto que restituya la convivencia, resquebrajada tras el cierre parcial de la frontera común.
«Yo no estoy destruyendo la revolución bolivariana, la revolución bolivariana se está autodestruyendo, se está destruyendo a sí misma, por sus resultados, no por cuenta de los colombianos ni del presidente de Colombia», dijo Santos en la sede de la presidencia.
Maduro ha acusado a Colombia de librar una «guerra» contra su moneda. Las operaciones de cambio entre el peso colombiano, el dólar y el bolívar en la frontera arrojan parte del precio de las divisas en el mercado no oficial venezolano, donde el billete verde se vende por casi 700 bolívares.
También alega que el contrabando y el paramilitarismo en la porosa frontera de 2.219 kilómetros son parte de la causa de la escasez y la criminalidad que sufren los venezolanos.
«A pesar de sus expresiones ofensivas e irrespetuosas a nuestra historia, yo como presidente de Venezuela estoy obligado a hablar con usted y a resolver por la vía de la diplomacia y el diálogo estos urgentes y muy graves asuntos de la frontera», dijo Maduro más tarde el miércoles.
«Y usted como presidente se ponga los pantalones y asuma la seguridad de sus frontera, junto al pueblo de la frontera, y yo asumiré mis responsabilidades», agregó en un discurso televisado.
Maduro extendió el lunes el cierre parcial de la frontera con Colombia al paso de Paraguachón, en el estado Zulia, y ordenó la movilización de 3.000 efectivos militares más a la zona. El presidente ya había ordenado el cierre de una parte de la frontera en el estado de Táchira hace tres semanas.
