Budapest.- Amnistía Internacional (AI), pidió que las autoridades húngaras permitan a las ONG y organizaciones humanitarias el acceso a los centros de recogida de refugiados del país, mientras que urgió a mejorar las condiciones en los mismos.
“Los observadores de derechos humanos deben tener acceso inmediato a los centros de registro y se deben hacer todos los esfuerzos posibles para mejorar las condiciones en las que permanecen los refugiados y solicitantes de asilo”, señala AI en un comunicado.
La organización recuerda que ayer se difundieron unas grabaciones en las que policías arrojan comida hacia decenas de refugiados en el centro de registro de la localidad de Röszke, cercana a la frontera con Serbia.
Ese vídeo, que tuvo una cobertura mundial, “destaca las deplorables condiciones que enfrentan estas personas, detenidas por las autoridades de Hungría”, añade la nota, donde Barbora Cernusakova, investigadora de AI, califica el caso de “verdaderamente repugnante”.
AI denuncia que las autoridades húngaras le negaron el acceso al centro de Röszke cuando lo pidió.
Por otra parte, la ONG pudo hablar con refugiados que informaron sobre “maltrato por parte de la policía y sobre la escasez de alimentos y agua, así como de instalaciones de sanidad”.
Las condiciones en el centro de Röszke, como el vídeo citado, han consternado también a otras organizaciones internacionales, como Human Rights Watch, que criticó hoy a Budapest por las mismas razones.
