Milicianos talibanes asaltaron una base de la Fuerza Aérea paquistaní el viernes y mataron a por lo menos 17 personas, la mayoría de las cuales oraban en una mezquita, dijo un portavoz militar, en el ataque más letal contra una instalación militar en años.
El complejo asalto contra un objetivo tan fortificado muestra que los talibanes aún pueden organizar ataques devastadores, a pesar de una campaña militar contra ellos y una ofensiva gubernamental tras la masacre en diciembre de más de 150 personas, la mayoría niños, en un colegio administrado por el Ejército.
Dieciséis de los muertos en el ataque del viernes estaban en la oración matinal en una mezquita y un capitán murió liderando el contraataque contra los milicianos, 13 de los cuales murieron, informó el mayor general Asim Bajwa en a través de Twitter.
Bajwa no dijo si los 16 muertos en la mezquita en la base aérea de Badaber, en la ciudad noroccidental de Peshawar, eran civiles o militares.
«Los terroristas entraron en la base por dos puntos. La confrontación empezó de inmediato», tuiteó Bajwa. Los atacantes «fueron contenidos dentro de un área cerrada. Mientras tanto, un grupo se apresuró hacia la mezquita, martirizando a 16 (personas) que rezaban», agregó.
Un alto funcionario militar paquistaní dijo que la mayoría de los que estaban en la mezquita en el momento del ataque trabajaban con la Fuerza Aérea.
«Todos los terroristas llevaban chalecos cargados con explosivos y estaban armados con granadas de mano, morteros y rifles AK-47», declaró a Reuters un funcionario militar en la base, que pidió no ser identificado, y agregó que se realizaban búsquedas en aldeas cercanas por militantes remanentes.
«Orgullosamente reinvindicamos el ataque en la base aérea paquistaní», dijo a Reuters el portavoz talibán Muhammad Khorasani, quien agregó que 14 militantes habían sido enviados a la base.
