Melbourne.- Momento de oportunidades. En la parte baja del cuadro ya no está Rafael Nadal. Rachas al margen, el español era un gran candidato para llegar lejos en este torneo, pero su adiós fue tempranero. Por eso, en esta mitad de la llave son Stan Wawrinka y Andy Murray quienes surgen como principales animadores. Ambos, sin problemas, a tercera ronda.
El suizo, campeón en Melbourne en 2014, se deshizo con facilidad de Radek Stepanek por 6-2, 6-3 y 6-4. Wawrinka no tuvo contemplaciones ante el checo, alicaído en su juego después de una serie de lesiones que lo hicieron transitar por una olvidable temporada pasada. Incluso aquí tuvo que sortear la clasificación.
El cuarto favorito destrabó el encuentro desde bien temprano. Tuvo chances de quiebre en su primer turno de devolución y se quedó con el saque de su oponente en el segundo, para el 3-1. Luego un nuevo break para cerrar el set.
En la segunda manga, historia similar. Golpe desde el resto para el 2-0 y solidez con el servicio -un sólo game se fue a ventajas, sin puntos de quiebre- para sacar dos parciales de distancia.
En el cierre, Wawrinka selló cualquier ilusión de Stepanek al recuperar el quiebre de ventaja en el sexto game y al levantar tres breaks en el 4-3 y otros tres en el 5-4, en un set que duró 57 minutos.
En poco más de dos horas de acción, el suizo se fue con una planilla de 15 aces y una interesante marca de 43 tiros ganadores, con sólo 23 errores no forzados. Su próximo desafío, el peligroso y agresivo Lukas Rosol, que viene de sacar en sets corridos a Jack Sock.
