La República Dominicana tiene el desafío de diseñar políticas públicas, dirigidas a enderezar la ruta hacia la creación y desarrollo de un hábitat saludable y sostenible, plantea el Informe Nacional Sobre Vivienda y Desarrollo Urbano Sostenible, dado a conocer por el Ministerio de Economía, Planificación y Desarrollo (MEPyD).
Enumera entre esos retos consolidar los mecanismos de planificación y gestión territorial, que el desarrollo sea inclusivo y llegue al territorio donde habitan las personas, alinear la gestión y el presupuesto a los resultados planificados, construir un desarrollo urbano y de territorios rurales basado en un enfoque diferente y repensar los criterios de priorización de la inversión.
El documento fue elaborado por una comisión creada por acuerdo del MEPyD), y del Ministerio de Relaciones Exteriores (MIREX), para dar una visión diagnóstica y facilitar la participación del país en el proceso que conduce a la Tercera Cumbre Mundial del Hábitat (Hábitat III), a celebrarse en Quito, Ecuador del 17 al 20 de octubre próximo.
La investigación pone de manifiesto los problemas causados por la urbanización acelerada, que se evidencia en la duplicación de la población en zonas urbanas (74.3% 2010), con respecto a la proporción de 50 años atrás.
Especifica que en ese mismo período la población en zonas rurales se redujo de 69.7% a 25.7%, indica una nota del MEPyD.
Al presentar datos de la población y su dinámica, la investigación precisa que en poco más de seis décadas se multiplicó por 4.2 veces, pasando de 2.36 millones a inicios de la década del 50 a 10 millones de habitantes en la actualidad (49% hombres y 51% mujeres).
Cada 20 años la Asamblea General de las Naciones Unidas convoca la Conferencia Hábitat, con la finalidad de discutir, tomar resoluciones y establecer compromisos hacia una agenda urbana sostenible global.
Este informe nacional fue producido bajo la responsabilidad de una comisión sobre Vivienda y Desarrollo Sostenible con la participación de organismos del Gobierno y de la sociedad civil, tomando en cuenta la visión de los objetivos y metas de la Estrategia Nacional de Desarrollo y de la Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible.
