Santo Domingo, RD.-Está subiendo la escalera con un libro en la mano, ataviado con un traje que tira al color de la noche, y afuera están aún los resabios de la última vaguada de octubre. Feria del Libro de Historia Dominicana, del Archivo General de la Nación.
Pastor Vásquez, periodista, contador de historias, Premio de Historia Vetilio Alfau, Premio de Historia José Gabriel García, reportero de todas las batallas, amigo de sus amigos y buen conocedor de los temas haitianos, vino de Puerto Príncipe, donde es Ministro Consejero de la Embajada dominicana, a presentar los dos tomos del libro “Diplomacia Dominicana con Haití a principios del siglo XX”. A la VI Feria del Libro de Historia Dominicana.
El Archivo General de la Nación tiene aire de palacio antiguo y esta noche él es el rey: el rey de las palabras, el rey de las historias. “Sólo soy un contador de historias porque en esencia lo que soy es un periodista que se dedica a investigar la historia”.
Los nuevos libros de Pastor cuentan, en oficios, cartas y memorandos, la historia de la convivencia, del apoyo y la complicidad de los generales de ambas naciones después de terminar los períodos de guerra.
Pastor Vásquez dice que preparó la obra para entender por qué Haití y República Dominicana, dos naciones que fueron enemigas, no han vuelto a tomar las armas, a pesar de los muchos desencuentros de la historia.
“Pensé –observa Vásquez– que esto tenía que ver con la diplomacia. Cuando comienzo a buscar me encuentro con que se escribían poemas y se mandaban rosas los generales dominicanos y los haitianos, se trataban bien, se confabulaban y se comunicaban, tenían una complicidad a través de la historia”.
Por esa razón, precisa Vásquez, fue que cuando llegaron a Jacmel los revolucionarios dominicanos, entre ellos Francisco del Rosario Sánchez, a organizar su incursión guerrillera hacia República Dominicana para conspirar contra la presencia de España, tras la Anexión, fueron bien recibidos por los haitianos y apoyados por el presidente Guillaume Fabre Nicolas Geffrard.
“Es que los haitianos –argumenta Vásquez– tenían el temor de la presencia de España aquí porque ellos pensaban que iban a pasar la frontera a esclavizarlos a ellos, o que los españoles iban a confabularse con los franceses para recuperar la parte haitiana de la isla”.
“Desde entonces –añade– hay una relación de complicidad, que se puede apreciar más en las correspondencias diplomáticas”.
Recuerda que Santiago Rodríguez, general dominicano de la Guerra Restauradora, fue a Cabo Haitiano y recibió el apoyo del general haitiano Philantrophe Noel para planificar el Grito de Capotillo, con el que se dio inicio a la gesta patriótica.
“Desde entonces, entre los militares dominicanos y haitianos no ha habido una sola confrontación bélica, pese a los asomos que hubo en 1901 y en 1937. No se ha tirado un solo tiro entre los generales dominicanos y los generales haitianos. Los líderes han tenido un proceso de paz, pese a todas las cosas que se ven en la prensa de hoy y que se veían también en la prensa de ayer”.