Así andas las cosas en este país: Julio Cury, un abogado que se considera brillante por los genes de su padre, el doctor Jottin Cury, y Víctor Díaz Rúa, empresario prominente, exministro de Obras Públicas y exsecretario de Finanzas del PLD, convirtieron la boda de Manuel Peynado, hijo del exvicepresidente de la República, y María de Moya, en un campo de batalla, al estilo del barrio más bajo de cualquier rincón de esta tierra.
Cury, cuñado de Manuel, y Díaz Rúa, amigo de la familia De Moya, fueron invitados a la unión matrimonial que se celebró el pasado sábado y allí se agarraron a los puños.
Lo que se dijo en principio fue que Díaz Rúa fue por detrás y agarró por el cuello a Julio Cury y este respondió con un puñetazo; sin embargo DominicanosHoy supo de buena fuente que el abogado fue quien provocó el altercado.
La fuente afirma que Julio Cury se presentó a la mesa en la que Díaz Rúa se encontraba con familiares y amigos, y allí se produjo una provocación del abogado al ingeniero. Julio ha sido un crítico del exministro de Obras Públicas; quien ha dicho de Cury que es una persona sin honor y sin credibilidad.
“Julio le dijo ladrón y Díaz Rúa le respondió que no se metiera en los asuntos políticos, porque no conocía al PLD y él sí, porque había majeado las finanzas de ese partido durante muchos años”, agrega.
Díaz Rúa admitió que tomó por la corbata a Cury, y le dio un bofetón. Cury dijo que sintió que lo tomaban por detrás, cuando conversaba con una dama, y que respondió tan rápido como pudo.
Con relación a este lamentable “pleito de gallera”, Cury escribió en sus redes: “le pido disculpas a la sociedad y dejo claro que fui provocado delante de mi familia, y eso no lo puedo permitir. Apuesto al debate intelectual, y si no pueden rebatirme en ese terreno, me sale Gascue y Díaz Rúa hoy lo sintió en su cara. Por mis venas corre sangre de Jottin Cury y él hoy lo sintió y comprobó”.
“Es una vergüenza que esto haya sucedido entre dos personas a las que podemos considerar educadas y lo lamentamos más, porque si hubiesen sido dos infelices, de seguro que ahora estarían presos; pero, como se trata de poderosos, todo quedará igual”, indicó.
Quién ha sido muy fuerte en criticar a ambos; pero, con más ahínco a su hermano, fue Oscar Cury publicó un artículo en sus redes, el cual tituló: “La boda de monos, termino a rabazo limpio”…
No me interesa la razón del escándalo, entre bomberos no se pisa manguera. A mí solo me molesta que Julio Cury se escude detrás de la memoria de mi padre para justificar su sinfonía de desaciertos que ya se ha convertido en un evento semanal. Es consistente al menos en algo, ya que de joven afirmaba que es mejor que hablen mal, a que no hablen en lo absoluto.
Julio se ha pasado la vida negociando con algo que no le pertenece, y que por respeto a sí mismo, no debería hacerlo. Se ve ridículo y cursi que a los cincuenta y pico de años siga invocando el nombre de su papi para granjearse impunidad.
Mi padre nos enseñó honestidad y respeto, pero obviamente esta comemierda no asistió a clases ese día. Durante los últimos diez años de su vida, ya muy anciano, frágil y deprimido con la situación imperante en el país, lo engaño, manipulo e intimido para hacerse de las suyas y acceder a propiedades del bien común.
Este señor es un oprobio, una vergüenza para la familia y para el país. Ahí no hay una pizca del ADN moral o ético de mi padre. Que sea hombre y forje su propio nombre, aunque esto solo sería posible en Najayo entre criminales.
Y a los anfitriones, eso les pasa por chulos, por querer estar bien con todo el mundo.”
Díaz Rúa es un reconocido seguidor del expresidente Leonel Fernández, y está imputado en el caso de corrupción de la empresa brasileña Odebrecht. Cury, de una notable familia de abogados, ha estado apoyando la posibilidad de que el presidente Danilo Medina se repostule como candidato presidencial del PLD para las elecciones de próximo año 2020. Por ahí debe andar el asunto.
