La depresión es una enfermedad silenciosa y que muchas veces el paciente mismo ignora. Generalmente asociamos este estado con el llanto, pero no todo depresivo llora, existe aquel que no llora jamás, hay el individuo que pierde el apetito y por el contrario otro que no parará de comer todo el tiempo.
Hay aquel que perderá el sueño y otro que no cesará de dormir. Algunos simplemente se sienten faltos de entusiasmo y empiezan a aislarse, y su comportamiento no convencional inclina a que el resto los excluya y que la sensación de aislamiento se haga más profunda. Existe el individuo que no deseará salir de la cama y otro que no parará de moverse. En ciertos casos extremos, las ideas suicidas comienzan a rondar en su cabeza. En la Homeopatía y en la Terapia Floral es muy importante la causa de la tristeza o de la depresión: Por la pérdida de un ser querido, por situación amorosa, por decepción, engaño, reveses de fortuna, sensación de abandono, añoranzas o en ocasiones simplemente una tristeza existencial que siempre ha estado presente. La profundidad de su sentimiento será relevante… Tristeza, depresión, desamparo, desesperanza, desesperación.
Tomamos en cuenta la alternancia de estados: si en otros momentos se manifiesta enojado, ansioso, vulnerable, temeroso, etc. En base a lo anteriormente se observará el medicamento homeopático adecuado, hay un sinfín de ellos, la terapia de flores de Bach personalizada al caso en cuestión…