Los californianos están contaminados con la sustancia herbicida ‘Roundup’

Los niveles del herbicida Roundup en la orina humana han aumentado de forma dramática en los residentes de California en las dos últimas décadas, informa un nuevo estudio.

El Roundup (glifosato) se usa para proteger las cosechas de maíz y soya genéticamente modificadas de las malezas, y también se utiliza en el trigo y la avena, señaló el autor del estudio, Paul Mills, profesor de medicina familiar y salud pública en la Universidad de California, en San Diego.

La orina recolectada de 100 californianos entre 1993 y 2016 muestra que los niveles de glifosato han aumentado con la llegada de las cosechas genéticamente modificadas, dijo Mills.

En las primeras muestras, «había niveles muy bajos, solo eran detectables en 12 de cada 100 personas», señaló Mills. «Entonces, a lo largo de los 22 años siguientes, encontramos un aumento más o menos del 1,000 por ciento en los niveles encontrados en las 100 personas, en promedio».

Pero el estudio no muestra que la exposición al glifosato provocara directamente algún problema de salud en esas personas, anotó el Dr. Nima Majlesi, director de toxicología médica en el Hospital de la Universidad de Staten Island, en la ciudad de Nueva York.

«Creo que esos estudios tienen un fallo inmenso, dado que en realidad no muestran ningún resultado adverso en los seres humanos», comentó Majlesi. «Lo único que se ve son cifras».

Algunas cepas de maíz y soya se han alterado genéticamente para hacerlas inmunes al Roundup, lo que permite a los granjeros administrar el herbicida sin el temor de dañar sus cosechas. Pero hay cierta controversia científica respecto al daño potencial que el Roundup podría causar a los humanos.

En 2016, la Organización Mundial de la Salud concluyó que «es poco probable que el glifosato plantee un riesgo carcinogénico a los humanos a partir de la exposición en la dieta». Pero en julio California se convirtió en el primer estado de EE. UU. en añadir el glifosato a su lista de carcinógenos conocidos.

En el estudio, Mills y sus colaboradores utilizaron muestras de orina que se habían recolectado y conservado durante años como parte de un estudio a largo plazo sobre el envejecimiento saludable. Las evaluaron junto con muestras frescas de 100 personas para detectar la presencia tanto del glifosato como del ácido aminometilfosfónico (AMPA), una sustancia orgánica que se produce cuando el cuerpo procesa el glifosato.

Los niveles promedio de glifosato en la orina aumentaron de 0.024 partes por mil millones en las muestras de 1993-1996 a 0.314 partes por mil millones en las muestras de 2014-2016, encontraron los investigadores

Compartir esta publicación:

WhatsApp
Facebook
X
LinkedIn
Pinterest

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *