HealthDay News.- Alrededor de 6 de cada 7 adolescentes de EE. UU. con lentes de contacto los usan de forma inadecuada, lo que aumenta sus probabilidades de infecciones oculares graves, señalan las autoridades de salud del gobierno.
En una encuesta de jóvenes de 12 a 17 años que usaron lentes de contacto en el año anterior, los investigadores encontraron que un 85 por ciento admitían tener al menos un hábito riesgoso que podría suponer una amenaza para su vista.
Incluyen dormir, hacer la siesta o nadar con los lentes de contacto; volver a usar la solución; lavar los lentes con agua del grifo; o no reemplazar los lentes y los estuches según las recomendaciones, de acuerdo con el informe de los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) de EE. UU.
Unos 3.6 millones de adolescentes de Estados Unidos usan lentes de contacto, dijeron los CDC. Los brotes de infecciones oculares graves son raros en este país. Pero ocurren con la mayor frecuencia en personas que no cuidan bien sus lentes de contacto.
De los adolescentes menores de 18 años que usan lentes de contacto, se estima que 3 millones no seguían del todo las directrices de su cuidado, reveló la encuesta. Esto también sucedía en un 81 por ciento de los adultos jóvenes (de 18 a 24 años). Los adultos de a partir de 25 años reportaron unos hábitos incluso peores: un 87 por ciento admitían al menos uno de esos fallos.
«Animar a los adolescentes a adoptar unos hábitos saludables de uso y cuidado de los lentes de contacto podría ayudarlos a mantener unos hábitos saludables en la adultez», comentaron los investigadores, dirigidos por la Dra. Jennifer Cope. «Hay aspectos que mejorar con el fin de prevenir unos resultados potencialmente graves, que incluyen la ceguera».
Evite dormir o hacer la siesta con los lentes de contacto para prevenir infecciones. Los autores del estudio dijeron que dormir con los lentes de contacto aumenta el riesgo de infecciones oculares hasta ocho veces.
Limpiar los lentes de contacto de forma adecuada, y visitar con regularidad a un proveedor de atención ocular, resulta esencial para prevenir las infecciones del ojo relacionadas con los lentes de contacto, apuntaron los autores del estudio.
De forma específica, recomendaron reemplazar los lentes de contacto con la frecuencia recomendada por un oftalmólogo, y reemplaza los estuches al menos cada 3 meses. También recuerde quitárselos antes de nadar o tomar una ducha.
El Dr. Andrew Pucker, profesor asociado en la Facultad de Optometría de la Universidad de Alabama, en Birmingham, dijo que los descuidos en el cuidado con frecuencia ocurren al viajar.
«Estar preparado al viajar es clave para la seguridad ocular», señaló Pucker. Lleve suministros para el viaje, y piense en su destino, aconsejó.
Si va a un país subdesarrollado, piense en dejar los lentes de contacto en casa para evitar el riesgo de una irritación o infección ocular, recomendó.