El papa Francisco designó a monseñor Víctor Masalles Pere como nuevo obispo de la diócesis de Baní, sede que estaba vacante desde abril de 2015 cuando su anterior titular, monseñor Freddy Bretón, fue designado como arzobispo de Santiago.
El Sumo Pontífice también anunció la designación del padre Carlos Thomás Morel Diplán como obispo auxiliar de la arquidiócesis de Santiago.
Con sus 55 años, Víctor Masalles Pere se convierte en el más joven de los obispos ordinarios de República Dominicana y le toca gobernar una diócesis con 828 mil habitantes, 35 sacerdotes y siete diáconos permanentes.
Monseñor Masalles se convierte en el tercer obispo de esa demarcación eclesial, creada en 1986 por el entonces papa Juan Pablo II.
El primer obispo fue monseñor Príamo Tejada, quien al igual que el recién designado pasó a ocupar esa posición en momentos en que era el único obispo auxiliar que en ese momento tenía la arquidiócesis de Santo Domingo.
