El Ejército sirio dijo este jueves que un alto al fuego unilateral apoyado por Rusia entró en vigor para permitir a la gente abandonar la parte oriental de Alepo, que está bajo asedio, una medida que según los rebeldes forma parte de una campaña sicológica para hacerlos rendirse.
Medios de comunicación estatales dijeron que el Ejército había abierto corredores de salida en dos áreas designadas, en concreto en el barrio de Bustan al Qasr y cerca de la carretera de Castello, en el norte de la ciudad. La televisión estatal mostró imágenes de autobuses verdes que esperaban allí.
Los bombardeos sirios y rusos sobre las partes de la ciudad que controlan los rebeldes, intensificados durante las últimas semanas, han alcanzado hospitales, panaderías y estaciones de bombeo de agua, y han causado la muerte de centenares de civiles.
El Ejército sirio dijo el miércoles que respetaría un alto al fuego para permitir que los civiles atrapados escapen y añadió que se había replegado para permitir que los combatientes rebeldes puedan abandonar la ciudad por los dos corredores designados.
«Garantizamos una salida segura, aprovechen la oportunidad y salven a sus familias», anunciaba un altavoz militar cerca de un corredor de salida, en imágenes transmitidas en directo por el canal de noticias libanés Al Mayadeen, favorable al Gobierno sirio.
Los rebeldes dicen que el objetivo de Moscú y del presidente sirio, Bashar al-Assad, es vaciar de civiles las áreas controladas por los rebeldes para poder tomar toda la ciudad.
