El psiquiatra dominicano Felipe Román sostiene que tener fe en Dios significa poseer una fuente de salud y bienestar emocional. “Se ha comprobado científicamente que las personas enfermas que confían en que serán sanadas logran su objetivo más rápido que los no creyentes”, afirma el especialista.
Esa confianza le permite al ser humano liberar una sustancia llamada endorfina que ayuda a mitigar el dolor y la desesperanza. Para Román “los que no creen buscan la manera de hacerle dudar a los que creen. Pero quienes oran y piden a Dios que ilumine a los médicos para que le devuelvan la salud lo logran. También cualquier proyecto que usted tenga tiene mayor éxito si tiene fe”, asegura quien se ha convertido en un gran estudioso de la conducta humana.
El doctor, quien es, además, un investigador de las escrituras y los personajes bíblicos, ha escrito varios libros como: Análisis Psicológicos y Filosóficos del Padre Nuestro; Moisés… No pudo pasar; Las Motivaciones de Jonás y Jacob, el amado de Dios.
El siquiatra explica que para un creyente la muerte no es la etapa final sino un paso para acceder a otro nivel más elevado.
Con relación a la diferencia de celebrar la Semana Santa antes y ahora, Felipe Román indica que anteriormente existía una mayor religiosidad, que muchas veces era impuesta por los dictadores latinoamericanos para mantener el dominio del pueblo: “Pero después la Iglesia Católica comprendió que era demasiada tradición, porque la gente iba el Viernes Santo a la iglesia como si fuera a un funeral, vestidos de negro y sin hablar”.
Agrega que también se prohibía tener sexo en Semana Santa o bañarse en el río. “Estas creencias eran mitos que fueron desmontados y así siguieron los cambios. Ahora el que va a la iglesia es porque quiere ir, no porque el Estado o la sociedad se lo impone o le crea el sentimiento de culpa para obligarlo a hacerlo con el miedo de que algo malo sucederá”, argumenta.
Aclara el profesional de la salud que en Latinoamérica es donde hay más católicos, que España misma o Italia: “La propia iglesia empezó a realizar los cambios y el que quiere seguir la tradición, salir fuera de la ciudad, a la playa o campo puede hacerlo. Ya que cualquier decisión no hace a uno u otro mejor o peor persona”, precisa.
Análisis conductas apóstoles
Felipe Román participó en el programa Enfoque Periodístico, conducido por Bienvenido Álvarez Vega, donde analizó estos temas y habló de la conducta de algunos discípulos de Jesús y otros personajes de la Biblia.
Al preguntársele sobre a qué atribuía que, paradójicamente, en los países europeos las iglesias están vacías, pero en América Latina, Estados Unidos, Asia, África, Canadá y Rusia suelen llenarse de feligreses, destacó que las personas ven cambios en el creyente, lo notan en paz, alegre, saludable y feliz, aunque tenga pocas cosas.
“Muchas personas no van a la iglesia evangélica porque desde que se convierten empiezan a decirles todo lo que no pueden hacer y la gente sale despavorida, mientras que cuando Jesús predicaba, solo decía ¨vengan y ya¨”.
Otra interrogante que respondió el consultor bíblico fue sobre el apóstol Pedro, quien negó a Jesús, ¿cómo explicar esa conducta desde la psiquiatría?
-“No es que Pedro fuera infiel, porque antes de negarlo, cuando fueron a apresar a Jesús, él sacó su espada y enfrentó a los soldados y le cortó la oreja a uno; es ahí cuando el señor le dice que guarde su espada, pues si él quisiera defenderse, vendrían legiones de ángeles a defenderlo.
“Después, cuando Pedro estaba observando cómo se llevaban a Jesús y que le preguntaron si era uno de ellos, lo negó porque su instinto de supervivencia se activó; además, ¿qué beneficios tenía decir que lo conocía y que lo crucificaran también?.
“No considero una debilidad la actitud de Pedro, lo que sucede es que, tal como dijo el escritor José Ortega y Gasset, el hombre es él y sus circunstancias. En ese momento la situación era diferente”, resume.
Traición de Judas
Felipe Román explica que los padres de Judas eran comerciantes y tenía una educación privilegiada: “Los judíos no esperaban un Dios que vinera a predicar, sino que los librara de los romanos y Judas pensó que vendiéndolo, se iniciaría dicha revolución, tal como hizo Ramón Matías Mella cuando tiró el trabucazo y dio inicio a la guerra patria.
“Pero este apóstol, al darse cuenta de que Jesús no era un líder militar, sino espiritual, se arrepintió”, concluye.
Además de estos personajes, el doctor Román analizó a Barrabás, Poncio Pilato y otras figuras importantes, cuyas conductas trascendieron y se narra en las historias del más leído de los libros en el mundo, la Santa Biblia.
La entrevista al siquiatra puede escucharse íntegra en el enlace: https://www.youtube.com/watch?v=mpl2pzUk-sA.
