Los combatientes curdos iraquíes respaldados por una campaña aérea estadounidense lanzaron un importante ataque este jueves para retomar la estratégica ciudad de Sinyar, que el grupo Estado Islámico tomó el año pasado en una ofensiva que hizo huir a decenas de miles de yazidíes y que dio pie a que Estados Unidos comenzara los bombardeos contra los extremistas.
Unas horas después de iniciada la operación, el Consejo Curdo de Seguridad Regional dijo que sus fuerzas habían tomado un tramo de la autopista 47, una de las líneas de suministro más activas del grupo EI, aislando por completo a Sinyar de los bastiones milicianos en Siria y el norte de Iraq. Los combatientes curdos agregaron que también tomaron los pueblos de Gabarra, en el frente occidental, y
Tel Shore, Fahdelya y Qen en el frente oriental.
Unos siete mil 500 combatientes peshmerga se acercaban a la localidad montañosa desde tres frentes, afirmó el consejo en un comunicado. Además de tomar la ciudad y la autopista, la Operación Sinyar Libre pretende establecer «una zona de seguridad significativa para proteger a la ciudad y sus habitantes de la artillería», añadió el comunicado.
En la madrugada del jueves se produjeron intensos disparos cuando los curdos comenzaron su aproximación entre ataques aéreos.
La coalición que lidera Washington afirmó que se habían producido 24 ataques aéreos en el último día, golpeando nueve unidades tácticas milicianas, nueve zonas de montaje y destruyendo 27 posiciones de combate, entre otros objetivos. Los aviones de la coalición han llevado a cabo más de 250 ataques aéreos durante el mes pasado en todo el norte de Iraq.
