Bioderecho y Libre Mercado: Un pulso por la vida

De manera silente, y como muchas otras acciones u omisiones ya genéticas por no agredir la cultura, los dominicanos seguimos de espalda a los procesos y sus consecuencias. El país enfrentauna sosegada, pero muy seria amenaza en términos económicos y quién sabe si de otra índole, Dios nos guarde.
 
Naciones hermanas ya lo han sufrido y sus consecuencias han sido devastadoras, lamentablemente igual sucedió con todo el proceso de privatización y capitalización de las empresas públicas, no supimos ver el monstruo y entender que ya todo ese proceso había fracasado en Latinoamérica.
 
Igual suerte, no merecemos correr por la falta de visión y me refiero puntualmente a la situación de perder el sitial que en la actualidad ocupamos en materia de producción agrícola orgánica en la que contamos con más de 150 mil hectáreas a su máxima capacidad de producción que sustentan a unos 24 mil productores orgánicos, que nos han colocado en la primacía de las exportaciones de cacao y Banano, entre otros productos tropicales preferidos por los consumidores en Europa y EE.UU., sin hablar de lo que ello aporta a las finanzas del Estado y al progreso sostenido en términos humanos y materiales.
 
La amenaza de la que hablamos se evidencia en las notificaciones y advertencias de prohibición que vienen realizando los compradores europeos de frutas y vegetales dominicanos, al Clúster de Invernaderos de la República Dominicana sobre el posible uso de las semillas transgénicas de la famosa empresa Monsanto en los invernaderos que exportan a Europa. Lo que ha sido expresado públicamente.
 
Pero porqué se mantiene ésta alarma que pone en peligro las exportaciones dominicanas, ¿quién es la empresa Monsanto? De una simple búsqueda en Google, podrá identificar un historialde demandas, producción en masa de productos cancerígenos y contaminantes, que afectan el medio ambiente y la vida como tal.
 
En la actualidad es famosa por producir el herbicida ROUNDUP y diversas semillas genéticamente modificadas protegidas por patente.
 
El DR-CAFTA, en materia de transgénico, nos presenta retos y desafíos importantes para estos años. Veamos:
 
1- Una vez se compran las semillas transgénicas  a ésta empresa, se hace bajo firma que compromete al productor a comprarlas en cada ciclo de siembra, pues no puede rehusarla debido a las patentes, lo que deja al productor en un círculo de dependencia frente a ésta, ya que tambiéntendrá que comprarle los herbicidas necesarios a la empresa pues como son semillas genéticamente modificadas (OMG), los herbicidas convencionales no son efectivos;
 
2- En la parte jurídica, económica y tecnológica, nos atreveríamos a especular con el siguiente eje: El parcelero RD, ha logrado obtener primacía mundial en las exportaciones orgánicas(en cacao, banano y otros productos), que representan el segundo renglón de la economía de su país,  pero un buen día  un parcelero Vecino OMG,  decide sembrar semillas transgénicas y sus plantas genéticamente superior polinizan y cruzan las plantas orgánicas de RD, y causan que sus compradores no quieran sus productos por no ser orgánicos, veamos algunos supuestos:

  • ¿Qué pasaría con RD y sus negocios?;
  • ¿Protegerá el país a RD, frente a las demandas que podría hacer Monsanto por las patentes de sus semillas transgénicas e  invasivas?;
  • ¿Se aplicaría la responsabilidad civil por la cosa inanimada al vecino por causar un daño en las ventas de RD?; y  finalmente
  • ¿Aplicará el país el principio de prevención a sabiendas de las consecuencias de la introducción de esta tecnología en otros países?.

 
Es alto comprobado, que la actual crisis que vive la humanidad, parte del descontrol y afán de lucro de las grandes corporaciones supranacionales, por lo que estamos a tiempo miremos el Espejo.

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