El embajador de la Unión Europea en la República Dominicana, Alberto Navarro, consideró «muy mala» la reciente decisión de Haití de prohibir la importación de 23 productos dominicanos, a partir del 1 de octubre, por vía terrestre y recordó que los perjudicados serán los más desfavorecidos.
En declaraciones durante un taller para el Caribe sobre el programa de preparación a desastres (Dipecho por sus siglas en inglés) de la Comisión Europea, dijo que según evaluaciones del departamento comercial de la representación de la UE en el país, la medida haitiana llevará a un encarecimiento de los productos de alrededor de un 40 por ciento. Igualmente, se mostró partidario de la reanudación del diálogo entre ambas naciones.
La opinión del diplomático también fue refrendada por Lorenzo Jiménez de Luis, coordinador residente de la Naciones Unidas en la República Dominicana, quien destacó la necesidad de que ambos países «habiliten mecanismos» que favorezcan el diálogo. Unos mecanismos, dijo, que pasan por «hablar, por sentarse a la mesa y entenderse».
En ese mismo sentido, se pronunció el Club de Madrid, entidad que mostró la necesidad de que dicho diálogo sea «franco» y se produzca al más alto nivel.
