Las bolsas de Asia cedían este martes en medio de la cautela antes de la reunión que la Reserva Federal de Estados Unidos sostendrá esta semana, y el yen subía después de que el Banco de Japón mantuvo su política monetaria estable.
El índice MSCI de acciones asiáticas fuera de Japón borraba unas ganancias iniciales y caía un 0,7 por ciento en el comercio de la tarde, siguiendo la dirección de las acciones chinas.
El índice compuesto de Shanghái bajaba un 2,5 por ciento y el índice CSI300 de las principales acciones que cotizan en Shanghái y Shenzhen restaba un 2,9 por ciento en un débil volumen de negocios.
Muchos inversores se abstenían de participar en el comercio por la inquietud sobre la dirección del mercado bursátil chino, luego de que un desplome de un 40 por ciento durante el verano boreal impulsó a Pekín a poner en marcha un plan de rescate.
En Japón, el índice Nikkei de la bolsa de Tokio subió un 0,3 por ciento, aunque cerró lejos de sus máximos de la sesión.
Como muchos esperaban, el Banco de Japón (BOJ, por su sigla en inglés) mantuvo su política monetaria estable al final de su reunión de dos días, pero advirtió que la desaceleración de la demanda en los mercados emergentes está afectando a las exportaciones y la producción de Japón.
Sumándose a la evidencia de que el enfriamiento de la demanda asiática está golpeando a Japón, un sondeo de Reuters mostró que la confianza de los fabricantes japoneses se desplomó en septiembre a un mínimo en más de un año.
El yen japonés se apreció después del anuncio del BOJ, avanzando un 0,3 por ciento frente al dólar a 119,94 unidades.
